El fenómeno de El Niño ha capturado la atención mundial una vez más. Ha desencadenado una serie de cambios climáticos extremos en diversas regiones del planeta. El Niño comenzó a mediados de 2023 y provocó temperaturas récord a finales del año pasado.
Ahora mismo el fenómeno del Niño está perdiendo fuerza. Esto podría suponer la aparición del fenómeno de La Niña.
Qué es el fenómeno meteorológico de El Niño y La Niña y por qué se produce
El fenómeno meteorológico conocido como El Niño-La Niña es un ciclo climático que afecta las temperaturas del océano Pacífico y, a su vez, influye en los patrones climáticos globales. Estos fenómenos son parte de lo que se conoce como El Oscilación del Sur (ENOS), un ciclo natural que se caracteriza por cambios en la temperatura superficial del océano y en la presión atmosférica en la región ecuatorial del Pacífico.
El Niño
El Niño se refiere a un calentamiento anormal de las aguas del océano Pacífico ecuatorial, que ocurre aproximadamente cada 2 a 7 años. Este calentamiento de las aguas tiene impactos significativos en el clima de muchas regiones del mundo.
La Niña
La Niña es el fenómeno opuesto a El Niño. Se caracteriza por temperaturas más frías de lo normal en la región ecuatorial del Pacífico. La Niña también influye en los patrones climáticos globales.
Efectos de El Niño
Precipitaciones anómalas: Lluvias Intensas e Inundaciones: En algunas áreas, El Niño puede provocar lluvias más intensas de lo normal, lo que resulta en inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra.
Sequías Severas: Por otro lado, otras regiones pueden experimentar una disminución significativa en la cantidad de lluvia, lo que lleva a sequías prolongadas y escasez de agua.
Aumento de temperaturas: En ciertas áreas, El Niño puede estar asociado con un aumento de las temperaturas, lo que puede desencadenar olas de calor extremas y condiciones climáticas adversas.
Efectos de la Niña
Lluvias intensas e inundaciones: En algunas áreas, La Niña puede provocar un aumento en las precipitaciones, lo que lleva a inundaciones y deslizamientos de tierra. Esto puede tener impactos significativos en la infraestructura, la agricultura y la seguridad de las comunidades.
Tormentas tropicales: La Niña puede aumentar la actividad de tormentas tropicales en ciertas regiones, lo que puede resultar en un mayor riesgo de huracanes y ciclones tropicales. Estas tormentas pueden causar daños graves a las propiedades y poner en peligro la vida humana.
Temperaturas más frías: En general, La Niña está asociada con temperaturas más frías de lo normal en algunas partes del mundo. Esto puede tener impactos en la agricultura, la salud humana y la demanda de energía para la calefacción en regiones afectadas.
Impacto en la Agricultura y la Economía
Pérdidas de Cultivos: Las variaciones en los patrones de lluvia y temperatura pueden afectar negativamente la agricultura, reduciendo la producción de cultivos y afectando la seguridad alimentaria.
Aumento del Riesgo de Incendios Forestales: Las condiciones cálidas y secas asociadas con El Niño pueden aumentar el riesgo de incendios forestales en áreas propensas a este tipo de desastres.
Riesgos para la biodiversidad
Alteraciones en los Ecosistemas Acuáticos: El calentamiento de las aguas oceánicas altera los ecosistemas marinos, afectando a las especies de peces y otros organismos marinos.
Migración de Especies: Las alteraciones en los patrones climáticos pueden provocar cambios en las rutas migratorias de las especies, lo que afecta a la biodiversidad y la distribución de la vida silvestre.
