El 44% de los productos alimentarios de los supermercados españoles que está empaquetado en plástico podrían sustituir este material por otro más sostenible, según concluye un estudio elaborado por Retail Economics.
Tal y como detalla la investigación, encargada por la empresa DS Smith, el empaquetado innecesario supone unos 16.600 millones de elementos de plástico cada año, que proviene, en su mayoría, del ‘packaging’ de carne y pescado (84%), productos lácteos (83%) y alimentos procesados, incluidas las comidas preparadas (78%).
Más de 1.500 productos
El Índice de Cambio de Materiales, producido por la consultora Retail Economics, audita 1.500 productos de alimentos y bebidas en los principales retailers de Francia, Alemania, Italia, España, Polonia y el Reino Unido.
El director ejecutivo de DS Smith, Miles Roberts, afirmó que se han logrado avances en la reducción de dicho empaquetado, pero que aún queda mucho por hacer.
“Creemos que el Gobierno puede y debe ser más exigente con todos nosotros, eliminando gradualmente ciertos plásticos para ayudar a crear un campo de juego equitativo que fomente la innovación, la inversión y genere una sana competencia para reemplazar el plástico”, dijo.
Se descubrió que la mayor parte del empaquetado plástico se utilizaba para alimentos procesados, encontrando que el 90% de los platos preparados y kits de comida venían empaquetados en plástico, el 83% de los productos lácteos y el 80% de la carne y el pescado.
Plástico innecesario
El estudio definió el plástico “innecesario” como aquel que podría ser reemplazado o reducido significativamente, hasta menos del 5% en peso, cambiando a materiales alternativos.
Casi todos los fabricantes de alimentos y retailers encuestados habían hecho compromisos para reducir el empaquetado plástico, pero una cuarta parte dijo que no iban en camino de alcanzarlos. El 40% dijo que los costos de materiales eran el mayor obstáculo.
Además, los productores y distribuidores de alimentos temen que las modificaciones en los envases puedan hacerlos menos competitivos: un 72% creen que los compradores no estarían dispuestos a pagar más por envases sostenibles, y casi dos tercios (65%) piensan que los consumidores no querrían sacrificar la comodidad por la sostenibilidad.
Retail Economics descubrió que el Reino Unido era el más dependiente del empaquetado plástico, con el 70% de todos los artículos de alimentos y bebidas en los estantes británicos conteniendo plástico. Los supermercados en Francia se encontraron con el menor plástico en sus empaques de alimentos y bebidas, con el 59%. España es el segundo país más dependiente del plástico en Europa, con más de dos tercios (67%) de los alimentos envasados en plástico.