Un proyecto innovador ha logrado transformar los restos de poda de la vid, conocidos como sarmientos, en cajas de cartón y etiquetas para vino en la región de Ribera del Duero. Esta iniciativa, denominada VINEBOX, representa un avance significativo en la búsqueda de alternativas sostenibles para la gestión de residuos agrícolas.
El proyecto, liderado por un consorcio de bodegas formado por las bodegas de la DO Ribera del Duero Pago de Carraovejas y Matarromera -ubicadas en Valladolid- y Ence Energía -localizada en Pontevedra- , ha demostrado la viabilidad técnica de utilizar los sarmientos como materia prima para la producción de pulpa de celulosa, sustituyendo parcialmente la celulosa tradicionalmente obtenida de árboles. Este logro no solo ofrece una solución innovadora para los residuos de poda, sino que también contribuye a reducir la huella de carbono del sector vitivinícola.
Residuos útiles y sostenibles
La iniciativa cobra especial relevancia ante la inminente prohibición de la quema de sarmientos, una práctica común pero altamente contaminante. VINEBOX se presenta como una alternativa viable para el sector, permitiendo valorizar estos residuos y convertirlos en productos útiles y sostenibles.
Tras 30 meses de investigación y desarrollo, el proyecto ha logrado transformar toneladas de sarmientos en pulpa de celulosa, que luego se ha utilizado para fabricar etiquetas y cajas de cartón para vino. Estos productos cumplen con los estándares de calidad y resistencia necesarios para su uso en la industria vinícola.
El proyecto ha contado con el apoyo de fondos europeos y del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), lo que ha permitido llevar a cabo una investigación exhaustiva y demostrar la viabilidad de esta innovadora propuesta.
Los impulsores de VINEBOX destacan la importancia de este proyecto para promover la economía circular y la sostenibilidad en el sector vitivinícola. Ahora, el desafío radica en lograr la adhesión de un mayor número de bodegas para aumentar la producción de pulpa de celulosa y garantizar la viabilidad económica del proyecto a largo plazo.
