España cuenta ya con 432 MW de potencia instalada, frente a los 422 MW de EEUU, lo que pone a nuestro país en la primera posición no sólo en desarrollo tecnológico, sino también en producción.
Esta nueva central se ha desarrollado con tecnología de colectores cilindro-parabólicos y cuenta con sistema de almacenamiento térmico mediante sales fundidas. Tiene una potencia de 50 MW. Por eso se ha convertido en un hito en el desarrollo del sector por el tamaño del campo solar, que con 550.000 m2 de área de captación, es el mayor de entre todas las centrales en operación, tanto en España como en el resto del mundo.
Por otro lado Protermosolar, asociación del sector español de la industria solar termoeléctrica, ha destacado que en menos de un año se podría existir una potencia adicional de cerca de 600 MW, y el conjunto de plantas inscritas en el registro de preasignación de retribución permitirá alcanzar una potencia cercana a 2500 MW en 2013.
Una inversión de 2.500 millones de euros
La inversión realizada por las empresas para la puesta en funcionamiento de centrales termosolares asciende ya a cerca de 2.500 millones de euros y rondará los 15.000 millones de euros acumulados en 2013. Para esa fecha operarán en España un total de 60 plantas termosolares de diferentes tecnologías y tamaños.
España es hoy líder mundial en este tipo de tecnología, y las empresas ligadas a estas centrales solares termoeléctricas están comenzando a participar en otros proyectos situados en muchas regiones del mundo (EE.UU., Norte de África, Oriente Medio, China, India, Australia.).
Además, a esta expansión de la energía termosolar dentro y fuera de España está contribuyendo también una de sus principales fortalezas diferenciales, como es su gestionabilidad y capacidad de almacenamiento, hoy fundamentales para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico español, puesto que de esta forma las centrales solares termoeléctricas son capaces de responder a la demanda energética, produciendo energía incluso en horas sin radiación solar, o almacenando energía cuando esta no se demanda en la red.