Esta explotación, propiedad de la firma Productos Dolomíticos de Málaga, SA (Prodomasa) y una de las principales de España dedicadas a la extracción de dolomía, se extenderá hacia los terrenos forestales ante el hallazgo de nuevas vetas y el inminente agotamiento de las actuales. De la cantera dependen directamente 80 trabajadores y otros 150 de forma indirecta, además de buena parte del abastecimiento de este mineral en el mercado nacional.
El proyecto de Prodomasa incorpora métodos que mejoran los utilizados hasta ahora para rebajar la repercusión sobre el paisaje. Entre ellos destaca la organización de zonas extractivas separadas por terreno natural y la realización de restauraciones ecológicas de modo simultáneo a la explotación.
La prevalencia del interés minero se condiciona al desarrollo de estas medidas, recogidas en la declaración de impacto ambiental emitida por la Consejería de Medio Ambiente en octubre de 2009, que obliga a restaurar el carácter forestal de toda la zona mediante repoblaciones con especies autóctonas (principalmente pinos, encinas y acebuches) y trabajos de regeneración natural.
La decisión Gobierno andaluz se adopta teniendo en cuenta tanto estos requisitos medioambientales como la importancia socioeconómica del proyecto, imprescindible para asegurar el abastecimiento de dolomía a la industria de los sectores químico, agrícola, cerámico, del vidrio y de fabricación de pinturas. El material que se extrae en Coín es único en España por su calidad, blancura y pureza, así como por su elevada composición de carbonatos de calcio y magnesio.
Prodomasa es la segunda empresa productora de dolomías en España y la primera en cuanto a comercialización de este producto para aplicaciones industriales, con una capacidad de producción de 750.000 toneladas anuales. Exporta a países como Estados Unidos, Canadá, Alemania o Reino Unido.