Por otra parte, la nueva política también deberá reafirmar el apoyo a los pescadores, promoviendo la creación de empleo para las comunidades costeras y asegurando el abastecimiento de pescado a los ciudadanos de la UE.
El texto reconoce que el sistema de planes plurianuales resulta vital para la supervivencia de los recursos del mar y exige al Consejo más esfuerzos para desbloquear este tipo de negociaciones entre los países de la UE, como ocurre en el caso del plan plurianual para la población occidental de jurel, bloqueada por los Estados miembros desde 2010.
El PE considera que los planes de gestión de la pesca a largo plazo deberían aplicarse a todas las especies posibles y adoptarse en pie de igualdad por el Parlamento Europeo y el Consejo.
Discriminación positiva
El texto alienta a la UE a utilizar medidas de "discriminación positiva", como garantizar un mejor acceso a los fondos comunitarios, en favor de los pescadores respetuosos con el medio ambiente. Además, los diputados exigen que los pescadores puedan tener acceso a otras fuentes de ingresos sin ser penalizados financieramente.
Se estima que el sector de la pesca (incluida la acuicultura) genera 34.200 millones de euros en ingresos anuales y mantiene más de 350.000 puestos de trabajo en la UE.