Muchas organizaciones políticas, ciudadanas y ecologistas han reaccionado a la noticia de la continuidad de Garoña hasta el 2019. Hay que destacar las declaraciones del secretario general del PP vasco, Iñaki Oyarzábal, en las que ha criticado la "demagogia" del PNV respecto a la central nuclear de Garoña (Burgos), tras lo que ha asegurado que, si los jeltzales realmente quieren cerrar la central, "pueden hacerlo" mediante sus consejeros en Kutxabank. Oyarzábal ha recordado que el banco es "accionista de referencia" de una de las empresas propietarias de la planta.
Otra de las reacciones políticas destacables ha sido la de la comunidad de Castilla y León, que tiene la intención de aplicar a la energía nuclear la ecotasa. Dicho impuesto gravará el daño medioambiental causado por determinados aprovechamientos del agua embalsada, por los parques eólicos y por las instalaciones de transporte de energía eléctrica de alta tensión.
Según ha precisado la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, la intención de la Junta es gravar a la energía nuclear, al igual que el resto de las fuentes de energía con la excepción de la térmica, que quedará exenta de las nuevas figuras impositivas por el número de puestos de trabajo que genera y por proceder "de un bien que en Castilla y León hay que proteger y potenciar".
Del Olmo ha anunciado la aplicación de este nuevo impuesto tras la confirmación el pasado sábado por parte del Ministerio de Industria, Energía y Turismo de la continuidad de la central nuclear de Santa María de Garoña, ubicada en el valle de Tobalina, en Burgos, hasta el año 2019.
"Desde luego, la Junta de Castilla y León va a proponer al Consejo de Gobierno la idea de un impuesto cómo no a la energía nuclear. Como el resto de las fuentes va a ser gravada, obviamente", ha explicado la consejera, que ha reconocido que se trata de un asunto que estudia desde hace tiempo el grupo de trabajo que se creó en su día para analizar la “ecotasa”.
Tras apelar al "rigor y seriedad", Del Olmo ha preferido no ha dado datos concretos sobre la recaudación prevista aunque ha recordado que en estos momentos ya hay comunidades autónomas que aplican impuestos de este tipo, como es el caso de Extremadura con cuyo modelo se obtendrían unos 14 millones de euros, o Castilla-La Mancha.
En cualquier caso, la consejera ha rechazado la idea de que este impuesto a la energía nuclear tenga un carácter "confiscatorio" y ha negado algunas propuestas que cifraban en 70 millones de euros una posible recaudación por este concepto.
En cuanto a la aprobación del nuevo impuesto, la consejera de Hacienda ha recordado que en un plazo aproximado de dos meses se tendrá que presentar el proyecto de ley de presupuestos de la Junta para 2012 al que acompañará una ley de medidas en la que se podría plantear esta nueva figura tributaria.