A las 11:00 horas (16:00 hora española) de ayer, “Sandy” se encontraba a unos 330 kilómetros al sureste de Atlantic City, en Nueva Jersey, y a unos 415 kilómeros al sur de Nueva York, e iba acompañado de vientos máximos sostenidos de unos 150 kilómetros por hora.
El huracán avanza en dirección norte-noroeste a unos 30 kilómetros por hora y, según el CNH, de seguir la trayectoria prevista "se espera que el centro de “Sandy” toque tierra a lo largo o justo al sur de la costa de Nueva Jersey".
Según el CNH, no se espera que el huracán se debilite antes de tocar tierra pero sí una vez esto ocurra. Antes de ello podría producirse un ligero "fortalecimiento".
Entretanto, el gobernador de Maryland, Martin O´Malley, ha ofrecido una funesta perspectiva de la situación. Según el gobernador, "habrá personas que morirán y serán matadas por esta tormenta". "La intensidad de esta tormenta es tal que indudablemente habrá algunas muertes que serán causadas por la intensidad de la misma, por las inundaciones, por la subida de las mareas, y por las olas", ha señalado en rueda de prensa.
Así las cosas, ha instado a los habitantes a "atrincherarse en casa con sus familias". "Con cuanta mayor responsabilidad actúen los ciudadanos, menos personas morirán", ha prevenido.
El alcalde de Filadelfia, Michael Nutter, también ha llamado a la prudencia. "Es malo y solo puede ir a peor", ha subrayado en declaraciones a una radio local. "Esta es una tormenta seria y tenéis que tomárosla en serio", ha pedido a sus ciudadanos.
Por otra parte, el Departamento de Transporte del estado de Connecticut ha ordenado el cierre de todas las autopistas estatales a partir de las 13:00 horas. Asimismo, se ha prohibido la circulación de camiones por las carreteras estatales.
La compañía eléctrica ha advertido de que el paso de “Sandy” podría afectar a hasta 60 millones de usuarios en la Costa Este, diez millones más que la previsión inicial realizada este domingo.
En alerta un reactor nuclear
La compañía energética Excelon ha emitido una alerta de nivel tres, de una escala de cuatro, para el reactor nuclear 615-MW Oyster Creek, ubicado en el estado de Nueva Jersey, debido al paso del ciclón.
Un portavoz de la Comisión de Regulación Nuclear (NRC) ha explicado que el temporal ha aumentado el nivel del océano Atlántico, lo que podría afectar a las bombas de agua que se usan para las piscinas donde se almacena el combustible gastado.
El funcionario ha indicado que, en el caso de que fuera necesario apagar el reactor nuclear, se podrían usar las mangueras antiincendios para seguir enfriando las piscinas.
Por otro lado, Constellation ha cerrado el reactor nuclear de 630-MW Nine Mile, ubicado en el estado de Nueva York, debido a un problema técnico, aunque se desconoce si está relacionado con “Sandy”.