La expansión del Parque Nacional de Cabrera cuenta con el apoyo de numerosos investigadores, que han podido conocer los fondos que se encuentran alrededor de este paraje.
Las propias concreciones de algas rocas calcáreas ya justifican de por sí su protección, pero, además, este lugar es de gran importancia para especies como el mero, el corvallo, el coral rojo, el coral negro y la langosta.
Este documento fue encargado hace casi tres años, pero nunca vio la luz. Y ha pasado de manos de una administración a otra sin que nunca haya sido hecho público ni mencionado, pese a las numerosas peticiones desde Oceana y otras organizaciones e instituciones que reclamaban proteger los alrededores del parque nacional.
La ONG Oceana hizo público entre 2007 y 2011 los descubrimientos de importantes zonas de fondos que contienen hábitats protegidos por la legislación europea y española en los alrededores de Cabrera. En sus peticiones también hacía especial referencia a estas formaciones coralígenas del este de Cabrera, que había conseguido filmar y así confirmar la riqueza y espectacularidad del paisaje submarino, incluyendo bosques de quelpos de profundidad y jardines de gorgonias.
“Vemos que todos los especialistas confirman la importancia de los fondos alrededor de Cabrera y, sin embargo, esto no ha motivado ninguna acción política, pese a que algunas de estas especies y hábitats encontrados aquí deberían contar obligatoriamente con protección como exigen diversas legislaciones europeas”, declara Xavier Pastor, director de Oceana para Europa. “Por el contrario, la tolerancia hacia la pesca de arrastre ilegal sobre esos fondos nos ha obligado a reclamar ante la Conselleria de Agricultura, Pesca i Medi Ambient del Govern”.