El convenio supondrá la instalación de 55 contenedores de 2.500 l. de capacidad para la recogida de ropa usada en otras tantas ubicaciones de Gijón, priorizando su colocación junto a islas de reciclaje existentes en las calles. Estos restos textiles de los ciudadanos se destinarán al reciclaje y/o reutilización, mediante la puesta en marcha en Asturias de una empresa de Economía Social para la recuperación de ese residuo textil gracias a su selección, clasificación y tratamiento, así como el desarrollo de un proyecto de comercialización con una previsión de creación de 15 puestos de trabajo en un plazo de tres años.
El destino de la ropa recogida puede ser, o para su reutilización y venta en varias tiendas localizadas en Asturias, tras un proceso de clasificación e higienización, o para el reciclado, tras su clasificación y conversión en trapo de limpieza industrial, relleno de tapicerías, materia prima…
Los beneficios de esta iniciativa son tanto medioambientales, al fortalecer la recuperación selectiva y el reciclaje de residuos textiles que acaban en el vertedero, y social al crear empleo estable en colectivos con dificultad además de dignificar el acceso a la ropa a las personas más necesitadas.