En España quedan tan solo unas 750 parejas de esta imponente rapaz, una de las más grandes de nuestra avifauna. Aunque en Extremadura la población de águila perdicera parece estable y cuenta con unas 90 parejas, es necesario conocer con más detalle cómo son los movimientos que realizan estas aves, cuáles son sus áreas de alimentación y campeo y cuáles los hábitats que precisa.
En Extremadura, una de las principales causas de muerte de la especie es la electrocución y los choques con tendidos eléctricos, además de los cebos envenenados y la caza ilegal. Su delicada situación de conservación requiere de medidas urgentes de estudio, gestión y conservación. Así, conocer con el máximo detalle sus movimientos es fundamental para la conservación futura de esta especie.
Un águila perdicera seguida por satélite
Hace ya varias décadas que el avance de las nuevas tecnologías en materia de dispositivos de seguimiento remoto, pusieron a disposición de investigadores y ornitólogos la tecnología satélite para el seguimiento de las aves. “Gracias a ello, es posible colocar un dispositivo GPS en la espalda del ave, a modo de una mochila, y que nos envíe la información de su posición con todo detalle vía satélite”, comenta Ana Bermejo, coordinadora del programa Migra de SEO/BirdLife. La información que envían se descarga vía Internet, de manera que todos los días se sabe dónde se encuentra el ave.
Este otoño se ha marcado con este sistema de seguimiento remoto un águila perdicera de la población reproductora de Cáceres. El águila, una hembra adulta capturada dentro del Parque Natural del Tajo Internacional, ha sido bautizada como Carmen.
El aparato que porta permitirá conocer con detalle y diariamente sus movimientos y determinar sus zonas de campeo y de alimentación, que además se podrán ver en la página web del programa Migra: www.migraciondeaves.org. Este marcaje proporcionará información de gran importancia para la conservación del águila perdicera en Extremadura. El trabajo se ha llevado a cabo gracias a la colaboración de la Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno de Extremadura, al Parque Natural del Tajo Internacional y de los agentes de medio ambiente de la zona.
Rapaz amenazada
El águila perdicera es una de las rapaces más amenazadas de España. La población española representa aproximadamente el 75% de la europea, encontrándose en declive en la mayoría de los pocos países que albergan poblaciones, por ello es tan importante su conservación.
Extremadura posee unas características muy favorables para la especie, con valles fluviales, amplias llanuras y zonas montañosas que proporcionan numerosas posibilidades como sustrato de nidificación. No en vano, alberga el 12% de la población española. La población extremeña se mantiene estable en todas estas áreas y la mayoría de las parejas se encuentran en Espacios Naturales Protegidos y áreas incluidas como ZEPA en la Red Natura 2000.
Programa Migra
El novedoso programa Migra, puesto en marcha en 2011 por SEO/BirdLife con la colaboración de la Fundación Iberdrola, incorpora las últimas tecnologías en sistemas de geolocalización y seguimiento remoto para conocer con mayor detalle los movimientos de las aves dentro y fuera de nuestro país. Con esta tecnología podemos conocer sus fechas de inicio y fin de sus migraciones, los lugares de parada y puntos de alimentación, el tiempo que tardan en realizar esos viajes, si se repiten en la migración primaveral y otoñal, las principales áreas de invernada y dispersión, o si las rutas son iguales año tras año. La Fundación Iberdrola colabora con este programa en el marco de su actividad en apoyo de la sostenibilidad y la biodiversidad, una de sus principales áreas de actuación.