SEO/BirdLife y WWF España consideran que tanto la normativa europea como la española impiden la aprobación de embalses para abastecer regadíos en espacios protegidos de la Red Natura 2000 cuando afectan a especies o hábitats prioritarios, caso del Embalse de Mularroya.
El MAGRAMA sigue adelante con su proyecto de presa de Mularroya pese a contar con dos sentencias en contra de la Audiencia Nacional y del Supremo, aunque reconoce que el proyecto tendrá un impacto negativo significativo sobre una especie En Peligro, el águila perdicera, y sobre dos espacios protegidos de la red Natura 2000.
La publicación, el 1 de junio, de la Declaración de Impacto Ambiental no ha sido más que un trámite que ya estaba predeterminado ya que en noviembre la Ministra anunció que reanudaría las obras de la presa paralizadas por los tribunales. Para ello, el Consejo de Ministros ha declarado la obra de interés público de primer orden. Las dos ONG conservacionistas consideran que un proyecto de regadío como el del Bajo Jalón no es motivo suficiente para declarar una presa de interés público de primer orden y afectar a especies y hábitats prioritarios en espacios protegidos de la Red Natura 2000. De hecho, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ya se ha pronunciado en este sentido en un caso similar en Grecia.
Las dos organizaciones consideran que el MAGRAMA intenta construir su presa a toda costa, a pesar de que nuevas resoluciones judiciales volverán a declararla ilegal, porque el proyecto no ha variado. Por eso, el último Consejo de Ministros ha exceptuado del cumplimiento de las condiciones de la nueva DIA con el objeto de poder meter las máquinas cuanto antes y así esquivar una posible paralización cautelar de los tribunales.
WWF España y SEO/BirdLife exigen al Ministerio que renuncie al proyecto y dedique fondos a restaurar los espacios protegidos. Las dos organizaciones, que consideran que la obra infringe las Directivas de Aves, Hábitats y Marco del Agua, pondrán en conocimiento de la Comisión Europea esta situación y le solicitará una acción urgente para evitar que se consolide una obra lesiva para la biodiversidad europea.