Está en marcha un esfuerzo mundial sin precedentes para combatir el cambio climático, lo que alimenta la confianza en que las naciones pueden, de manera rentable, lograr el objetivo que habían anunciado:
"limitar el aumento de la temperatura global por debajo de los 2 grados centígrados".
Acceda aquí al documento "Informe de síntesis sobre el efecto agregado de las contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional ". En esta otra página dedicada al Informe de síntesis, encontrará además del informe otros documentos e información relacionados.
El pasado viernes se dio a conocer un nuevo informe que analiza el impacto colectivo de más de 140 planes nacionales de acción climática y que indica que, juntos, esos planes pueden ralentizar de forma drástica el ritmo de las emisiones globales a la atmósfera.
Otro hallazgo clave al que llega el informe es que el impacto agregado de las contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional (INDC, por sus siglas en inglés) hará que caigan las emisiones per cápita en los próximos 15 años.
“Estas contribuciones INDC, o planes nacionales de acción climática, representan un anticipo claro y determinado por parte de la comunidad mundial de naciones en una nueva era de ambición climática. Gobiernos de todos los rincones de la Tierra han señalado a través de sus INDC que están determinados a jugar su papel en función de sus circunstancias nacionales y sus capacidades”, dijo Christiana Figueres, Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático (CMNUCC).
“Implementados completamente, juntos, estos planes suponen el comienzo de una merma significativa en el crecimiento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Son una base, unos pilares, sobre los que se puede construir una ambición incluso mayor. Estoy convencida de que estas contribuciones INDC no son la última palabra de los países sobre lo que están listos a hacer y a lograr a lo largo del tiempo. El viaje hacia un futuro climáticamente seguro está en marcha y el acuerdo que se firmará en París puede confirmar y catalizar esa transición”, añadió.
El informe que publicó la Secretaría de la CMNUCC engloba el efecto agregado de los planes climáticos nacionales de 146 países presentados hasta el 1 de octubre de 2015. En total son 119 contribuciones INDC separadas por parte de 147 Partes de la CMNUCC, incluyendo la Unión Europea como Parte única representando a 28 países.
Desde el 1 de octubre de 2015 se han presentado nuevas contribuciones INDC y se espera que lleguen más. Hasta la fecha, se han recibido 156 contribuciones INDC.
Entre los 146 planes están todas las naciones desarrolladas y a tres cuartos de los países en vías de desarrollo Parte de la CMNUCC. Juntos, estos planes cubren el 86% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, lo que supone cuatro veces más del porcentaje englobado en el primer periodo de compromisos del Protocolo de Kyoto, el primer tratado del mundo para la reducción de emisiones y que exigía recortes de emisiones a los países industrializados.
Uno de los resultados clave del informe es que las INDC conllevarán una reducción de las emisiones medias mundiales per cápita de hasta un 8% menor en 2025 que en 1990 y hasta un 9% menor en 2030.
“Las contribuciones INDC tienen la capacidad de limitar el aumento previsto de la temperatura a unos 2,7 grados centígrados, lo que no es en ningún caso suficiente, pero sí es mucho menor que los estimados cuatro, cinco o más grados de calentamiento que muchos han proyectados sin incluir las INDC”, dijo la Sra. Figueres.
El informe de la Secretaría no evalúa directamente qué implicaciones tendrán estas contribuciones INDC en la temperatura para finales de siglo porque para ello se requieren datos sobre las emisiones posteriores a 2030.
Sin embargo, en base a una serie de supuestos, metodologías y datos, otros análisis independientes han hecho en proyecciones del impacto de las INDC sobre la temperatura apuntando a una gama de estimaciones por debajo y por encima de 3 grados centígrados.
Es importante tener en cuenta que todos los análisis calculan que en 2025 habrá más o menos los mismos niveles de emisiones que en 2030. Todos confirman que las contribuciones INDC, implementadas en su totalidad, suponen un avance bueno e importante con respecto a escenarios previos.
“Estos planes establecen un rumbo que claramente reconoce que una acción climática exitosa no solo logra reducir las emisiones sino que implica otros beneficios económicos y sociales para los gobiernos, los ciudadanos y las empresas”, añadió.
“Con el apoyo financiero a los países en desarrollo, con un destino claro a largo plazo —la neutralidad climática en la segunda mitad de este siglo—, y con una aceleración de la ambición, de una manera estructurada, transparente y a tiempo; las contribuciones INDC son una parte y fuente de inspiración de lo que será el Paquete de París”, dijo la Sra. Figueres.
Las contribuciones INDC pueden tener un impacto significativo en la curva de emisiones. Los resultados clave al detalle
- La mayoría de las contribuciones INDC son de ámbito nacional y algunas incluyen acciones inmediatas, subrayando la comprensión por parte de los gobiernos de que es urgente aumentar el nivel de ambición, tanto antes como después de 2020, cuando entre en vigor el nuevo acuerdo de cambio climático.
- El informe muestra que las INDC representan una ralentización substancial del crecimiento de las emisiones de una manera rentable, lo que hace todavía posible y asequible que en 2030 estemos en el necesario camino de limitar el aumento de la temperatura mundial por debajo de los 2 grados centígrados.
- Además del impacto en las emisiones per cápita, el informe muestra que con las INDC se espera que el ritmo de crecimiento de las emisiones se ralentice en aproximadamente un tercio en el periodo 2010-2030, con respecto al ritmo de crecimiento de las emisiones en el periodo 1990-2010. Este escenario supone una reducción de emisiones de unas 4 gigatoneladas (Gt) en 2030 en comparación con los escenarios previos a las INDC.
- A pesar de que este informe no evalúa las implicaciones para el aumento de la temperatura, el análisis de la Agencia Internacional de la Energía sugiere que las contribuciones INDC pueden poner al mundo en una trayectoria hacia un aumento de la temperatura de 2,7 grados centígrados en este siglo.
- Todas las contribuciones INDC de los países industrializados son incondicionales y muchas de las INDC de los países en vías de desarrollo también lo son. Las contribuciones condicionales representan aproximadamente el 25% del alcance total de las reducciones de emisiones.
- Todas las contribuciones INDC cubren el dióxido de carbono (CO2) y muchas también cubren metano, óxido nitroso y otros potentes gases de efecto invernadero.
Las contribuciones INDC apuntan a una gran transformación económica
Las INDC presentan políticas climáticas, programas y acciones en numerosos sectores, como la descarbonización de la producción de energía y, principalmente, una transformación masiva hacia energías renovables, mediante mejoras en la eficiencia energética, en la gestión de la tierra y en el planeamiento urbano y en los transportes.
- Las contribuciones reflejan la creciente confianza de los gobiernos en la respuesta global que están dando miles de empresas, inversores, alcaldes y gobiernos regionales, conscientes de que su propio futuro sostenible se construye sobre las bases de esta transformación.
- La Secretaría de la CMNUCC publicará en noviembre otro informe destinado a los responsables de políticas titulado “Acción Climática Ahora”, que evidenciará el enorme potencial para la reducción de emisiones y los múltiples beneficios económicos de la aplicación de prácticas climáticas idóneas en los mayores sectores, desde la energía al transporte, pasando por la construcción y el sector forestal.
- Más de la mitad de las INDC incluyen una visión a largo plazo sobre la transición hacia un crecimiento económico bajo en emisiones de carbono y un desarrollo con alta resiliencia. Muchos predicen que en 2050 estarán cerca de alcanzar la neutralidad climática, es decir, el punto en que las emisiones de origen humano son absorbidas por los sistemas naturales, almacenadas o utilizadas.
La implementación de las contribuciones INDC también será un apoyo para que se puedan alcanzar los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). De hecho, la realización de estas contribuciones INDC será un factor clave para el éxito de los ODS, que no sobrevivirían a un futuro de impactos climáticos extremos.
- 100 de las contribuciones INDC incluyen medidas para reducir la vulnerabilidad y fomentar la resiliencia, lo que viene a reflejar la necesidad de incluir el ya existente cambio climático en los planeamientos nacionales.
Los países con un componente de adaptación en sus INDC canalizan sus esfuerzos a través de una serie de instrumentos que incluyen leyes de cambio climático y regulaciones, planes nacionales o sectoriales y estrategias. Los ámbitos de mayor preocupación son los recursos hídricos, la agricultura, la salud, los ecosistemas y el sector forestal.
Las contribuciones INDC y el acuerdo de París: el arranque de una acción mundial a largo plazo
El nuevo acuerdo sobre cambio climático que se alcanzará en París puede fijar las INDC en términos de reconocimiento, rendición de cuentas y apoyo adecuado, lo que impulsará la ambición extra necesaria.
- A medida que pase el tiempo, será necesaria una mayor acción. Por ello, es importante tener en cuenta que este conjunto de contribuciones INDC no implican un bloqueo del nivel de las emisiones mundiales para 2030. Muchas naciones sobrepasarán los objetivos establecidos con respecto a lo que hoy se ve como realizable.
- A lo largo del tiempo, las contribuciones nacionales pueden ser revisadas al alza, especialmente a medida que se movilice la financiación climática y otras formas de cooperación multilateral que serán catalizadas por el nuevo acuerdo de París y que permitirán a los gobiernos llegar más lejos y más rápido, incluso antes de 2030.