Las empresas eléctricas ratificaron este miércoles su «compromiso total» para alcanzar la excelencia operativa en todas las centrales nucleares y continuar con los esfuerzos de mejora de los mismos, garantizando la seguridad y la cobertura de la demanda, y contribuyendo a la reducción de gases de efecto invernadero (protocolo de Kioto) que le corresponde a España, informó la patronal eléctrica Unesa.
La patronal destacó que este compromiso se viene materializando en unas inversiones relacionadas con la seguridad de más de 200 millones de euros anuales, «lo que duplica a lo largo de su vida útil el valor de la fuerte inversión realizada durante la construcción».
Así, Unesa subrayó que la seguridad de las centrales nucleares españolas «se viene manteniendo en el mismo nivel en los últimos años y es comparable al de las de los países de nuestro entorno y tecnología sin perjuicio de seguir con los esfuerzos necesarios en un proceso de mejora continua».
En la reunión mantenida hoy en la sede del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) entre el comité de enlace de este organismo y las eléctricas, las empresas manifestaron que la explotación de las centrales nucleares no sería posible si su operación no se realizara de forma «totalmente segura para sus trabajadores y el público.
Unesa indicó que la entrada en vigor en 2006 de la Instrucción IS-10 del CSN «ha supuesto la inclusión de requisitos de notificación más precisos y exigentes que los previamente existentes de 1990, lo que implica desde entonces la notificación de un mayor número de incidencias».
«Además una notificación no es en sí misma un indicador de la seguridad de la central ni es equiparable a un incidente o accidente en la misma, ya que la mayoría de ellas tienen ver con sistemas electromecánicos convencionales, sin relación con la seguridad. Las notificaciones, desde el punto de vista de su implicación en la seguridad, se clasifican conforme a la escala internacional (INES) del Organismo Internacional de Energía Atómica», indicó en un comunicado.
Así, la patronal destacó que las centrales nucleares vienen notificando cada año un número de incidencias semejante, teniendo en cuenta el cambio de normativa ocurrido en 2006, y con un nivel de implicación en la seguridad del mismo orden. Asimismo, señaló que «estos son comparables a los de las centrales de los países en los que se reportan incidencias de forma equivalente».