Cultivo del maíz
Investigadores de las universidades de Sevilla y Córdoba han comprobado la eficacia de biofertilizantes, obtenidos a partir de lodos de depuradora, en la mejora de la producción y calidad del maíz cuando son suministrados sobre la planta y hoja del cultivo. En concreto, la aplicación de esta enmienda, aumenta el rendimiento del cultivo un 17% e incrementa las proteínas del grano un 30%.
Según Manuel Tejada, del grupo de investigación Edafología Ambiental de la Universidad de Sevilla, se ha constatado que cuando el compuesto orgánico se aplica por este procedimiento existe una repercusión positiva en la nutrición de la planta, lo que influye en la producción y calidad de la cosecha. Por el contrario, cuando se aplica al suelo no se aprecian mejoras significativas.
Los resultados, publicados en la revista European Journal of Agronomy, han revelado que las sustancias orgánicas que contiene este biofertilizante permiten que la planta pueda absorber mejor los nutrientes y de esta forma facilitar su crecimiento.
Para la obtención del biofertilizante se introducen los lodos, procedentes de aguas residuales de depuradora, en un biorreactor o recipiente que mantiene un ambiente biológicamente activo, donde en condiciones óptimas de pH y temperatura, así como con el uso de determinadas enzimas, se transforma el lodo en un compuesto orgánico muy rico en proteínas de bajo peso molecular –como los aminoácidos– , fácil y rápidamente asimilables por la planta.
“Con este trabajo conseguimos constatar la efectividad de un biofertilizante elaborado a partir de lodos y revalorizar un residuo que incrementa cada año y no encuentra nuevas vías de aplicación”, afirma el científico de la Universidad de Sevilla.