Las industrias adoptan una nueva estrategia en el reciclaje de plásticos
Al ritmo actual de producción de plásticos y de vertidos de residuos, en 2050 en los mares y océanos de nuestro planeta habrá (en peso) más plásticos que peces. Así lo indicaba el estudio presentado por la Fundación Ellen MacArthur en la reunión del Foro Económico Mundial celebrada el año pasado en Davos (Suiza).
Este año, en el mismo encuentro internacional, ha sido presentada una estrategia para hacer frente a la invasión de los residuos de plástico. Entre otros objetivos, este proyecto pretende reciclar a escala mundial el 70% de los envases de plástico; un objetivo realmente ambicioso si se recuerda que actualmente solo se recicla -aproximadamente- el 14% de los envases de plástico que se ponen en el mercado cada año en todo el mundo.
El plan de acción para la Nueva Economía de los Plásticos (ver documento en inglés: The New Plastics Economy: Catalysing Action) ha sido presentado en Davos el 16 de enero con el apoyo explícito de más de 40 líderes de instituciones y grandes empresas relacionadas con la fabricación, utilización y gestión de envases de plástico, entre las que destacan Unilever, Danone, Carrefour, Coca-Cola, Suez y Dow Chemical.
El informe de 42 páginas presentado en Davos enumera las cifras del problema de producción y vertido de residuos y, en la parte más importante del trabajo, proporciona a la industria global de plásticos una estrategia de transición para mejorar el diseño de los envases (para reducir su peso, por ejemplo) y conseguir mayores tasas de reciclaje.
El documento especifica, por ejemplo, los beneficios esperados con la aplicación de medidas de innovación en la fabricación de envases, la unificación de los tipos de plásticos, la reducción de las mezclas de plásticos en cada uno de los envases, la universalización de los sistemas de recogida selectiva, la mejora en las plantas de selección, la reducción de los embalajes superfluos o la valorización de los residuos para su reutilización como materias primas.
Pequeños cambios e innovaciones en la fabricación, el diseño o el formato de los envases “pueden hacer que la economía del reciclaje sea viable y nos lleve a una espiral positiva de mayores rendimientos, menores costos y mejor diseño”, ha indicado Martin R. Stuchtey, profesor de estrategia y gestión de recursos de la Universidad de Innsbruck y colaborador en la redacción del estudio. “El resultado de esta nueva estrategia es que el plástico seguirá siendo un material valioso antes y después de su uso”, indica el profesor Stuchtey.