La organización ecologista WWF/Adena alertó hoy de que con Drupa, el lince ibérico que ha muerto atropellado en el kilómetro 21 de la carretera A-483, en el tramo entre Almonte y el Rocío, son "ya cuatro los ejemplares que han fallecido en esta misma zona, uno de ellos, Neo, en el mismo punto kilométrico". Asimismo, advirtió de que con la construcción de la variante del Rocío el riesgo "aumentará considerablemente".
El portavoz de WWF/Adena, Juanjo Carmona, explicó a Europa Press que esta joven hembra atropellada es el sexto ejemplar que muere este año, lo que, considerando la "escasa población" de lince ibérico que existe en Doñana, "hace necesario la realización y ejecución de un plan de emergencia que afronte entres sus prioridades la permeabilización del territorio ante el acoso de las infraestructuras que lo cercan".
Así, Carmona opinó que la muerte de los cuatro linces Drupa, Pitu en el año 2000, Neo en el 2003 y Bambú en el 2006 –a los que se suman otros dos casos de linces desaparecidos– es una "clara muestra de que en este tramo, plena zona de expansión de los ejemplares jóvenes, no se han tomado medidas para facilitar la permeabilidad del territorio, lo cual permitiría a las especies transitar sin el alto riesgo de atropello que existe actualmente".
En este sentido, aseguró que la A-483 "ostenta el triste récord de linces atropellados, con un total de catorce desde el año 1982, de los cuales seis han muerto desde el año 2000". "Las altas velocidades que se alcanzan en esta vía, así como el aumento del tráfico de vehículos privados, sin que los responsables políticos hayan puesto en marcha medidas eficaces, tienen como consecuencia el alto número de atropellos", argumentó.
Además, aseguró que el riesgo existente en este tramo de carretera "aumentará considerablemente con la construcción de la variante de El Rocío, "ya que desde la curva de San Ramón hasta la aldea, va a tener un gran impacto, y. como vimos en el Consejo de Participación de Doñana, la Junta no aporta soluciones a los problemas de movilidad de la fauna en la Rocina, lo cual ha sido incluso reconocido por la propia Consejería de Obras Públicas".
Según explicó Carmona, los linces que mueren atropellados en este tramo proceden de la zona de cría de Coto del Rey. Éstos, una vez crecidos, "son expulsados por los ejemplares adultos que poblaban previamente el territorio, por lo que los jóvenes se ven obligados a buscar un territorio donde asentarse".
"Es durante esta búsqueda, cuando se producen los atropellos mortales, ya que los linces jóvenes entran y salen de los territorios, enfrentándose con la dificultad de que se encuentran cercados por numerosos frentes: la zona principal de cría de Coto del Rey está obstaculizada por el accidente natural de las marismas; luego también actúa como barrera la A-483; en la zona norte nos encontramos con la vía rural que va de Villamanrique a El Rocío y el camino forestal entre Hinojos y la aldea, además de la carretera nacional que va desde Hinojos a Almonte", desgranó.
Por ello, consideró "imprescindible" que la Junta "deje de realizar actuaciones localizadas y afronte la complejidad de la movilidad y permeabilización de los espacios naturales, para lo que puede, entre otras cosas, ampliar los corredores en Doñana y recuperar aquellos que están ocupados con zonas de cultivo o construcciones ilegales". "No podemos consentir que Doñana se convierta en un zoológico cercado por infraestructuras y viviendas", reivindicó.
Por último, afirmó que el descenso de atropellos registrados durante el año 2008 puede deberse al "fuerte descenso de la población de linces de Doñana, que perdió 11 ejemplares por la enfermedad de la leucemia felina".