El noroeste de España sufre el asedio de las acacias
El número de poblaciones de Acacia dealbata o mimosas en los últimos años en el noroeste peninsular ha aumentado de forma preocupante y el espacio ocupado por esta especie es cada vez mayor. El incremento se está dando de forma considerable tanto en espacios perturbados, como en zonas periurbanas, cercanías de las vías de comunicación -carreteras y vías férreas- y en plantaciones forestales de eucalipto y coníferas como el pino.
Científicos de la Universidad de Vigo (UVigo) y de la Universidad de Coimbra (Portugal) han estudiado el comportamiento de esta especie para evaluar si el crecimiento de las mimosas está relacionado con factores ambientales en matorrales y pinares no alterados en el noroeste de la península ibérica.
“El proceso de invasión de A. dealbata está favorecido principalmente por perturbaciones ambientales. Sin embargo, hemos detectado que esta especie está invadiendo comunidades vegetales inalteradas hasta ahora y los factores ambientales que influyen en su propagación en estos ecosistemas siguen siendo poco claros”, dice a Sinc Jonatan Rodríguez, investigador de la UVigo y coautor del trabajo.
Los investigadores colocaron parcelas permanentes de muestreo a lo largo del borde de invasión en cada comunidad de plantas y registraron los incrementos de altura y diámetro del tallo en ejemplares marcados a lo largo de dos años. El número de nuevos árboles de acacia se registró al final del estudio.
Algunos de los factores ambientales que se evaluaron fueron las propiedades fisicoquímicas del suelo, la cubierta vegetal nativa y características de la parcela, para determinar su efecto sobre el crecimiento de los árboles invasores. “Hallamos un patrón de crecimiento diferente en las mimosas dependiendo de la comunidad de plantas estudiadas”, señala el investigador.
Los bosques de pino tenían mimosas con incrementos de altura y diámetro significativamente mayores y mayor número de nuevas acacias que los matorrales. Además, se halló que la primavera favorece el crecimiento la especie invasora en los bosques de pino, mientras que el crecimiento no varía a lo largo del año en los matorrales.
“En cuanto a los parámetros ambientales que influyen en el crecimiento de A. dealbata, encontramos un efecto negativo de la luz y la orientación de la parcela, pero también un efecto positivo por el contenido de potasio en el suelo y la elevación de la parcela”, asegura el científico.
¿Tiene algo que ver la captación del N del aire, por parte de las acacias ?