¿Qué ciudades son imprescindibles para disfrutarlas en bicicleta?
1. Ámsterdam, Holanda
Se calculan que hay más de un millón de bicicletas sólo en la ciudad de Ámsterdam. El 60 por ciento de los desplazamientos se hacen por los cerca de 400 kilómetros de carril bici. El tamaño de la ciudad, su terreno llano y la titánica tarea de conducir un coche por sus calles hacen de la bicicleta el transporte perfecto para esta ciudad. Aun sabiendo que en esta ciudad el medio de transporte favorito es la bicicleta, es bueno saber un par de cosas antes de aventurarse pedaleando por sus calles. Debido a que son muy comunes, cuidado con los robos, siempre prestando atención a la seguridad de la bicicleta. En lo que a circulación se refiere, es obligatorio atenerse a todas las señales de tráfico y evitar así una posible multa, así como prestar atención a los numeroso tranvías de la ciudad. En definitiva, Amsterdam es el lugar por antonomasia en lo que a movilidad en bicicleta se refiere.
2. Barcelona, España
En los últimos años, la capital condal ha trabajado duro para la consecución de un plan que de protagonismo a la movilidad en bicicleta. Su cada vez más extensa red de carril bici y su sistema público de alquiler de bicicletas, han transformado en pocos años el panorama de la movilidad en Barcelona. Así que si quieres visitarla y admirar con calma su arquitectura modernista tendrás que alquilar una bicicleta en una de los muchos negocios dedicados a ello.
3. Burdeos, Francia
Si eres un amante de la gastronomía, el vino y los largos paseos en bicicleta, no te puedes perder la ciudad del vino por antonomasia. Situada en el suroeste de Francia, Burdeos cuenta con más de 200 kilómetros de carril bici que la rodean. Una sencilla y cómoda forma de realizar una de la rutas del vino más famosas del mundo, haciendo paradas en los chateaux repartidos por sus impresionantes paisajes. En definitiva, se trata de una ciudad privilegiada para ir en bicicleta y recorrer sus hermosos parajes.
4. Copenhague, Dinamarca
En está ciudad europea lo de ir en bici es algo cultural gracias a, entre otras cosas, sus leyes en lo que a contaminación se refiere y a la protección con la que cuentan los ciclistas. Políticos y empresarios se desplazan cada día de sus casas al trabajo en bicicleta, una forma de dar ejemplo y demostrar la utilidad de este medio de transporte. Es más, casi la mitad de su población utiliza la bicicleta para trasladarse. Es tal el volumen de bicicletas y el amor que Copenhague tiene por las dos ruedas que hasta el pulso del tráfico se rige por ellas. Los semáforos de la ciudad se han ajustado al ritmo y flujo de los ciclistas. Aquí la bicicleta es más que un medio de transporte. Es un medio de vida.
5. Berlín, Alemania
Y de Copenhague a Berlín, si, en bici. Todo ello gracias al carril de 620 kilómetros que conecta ambas ciudades, una ruta libre de coches que es el “caramelo” de cualquier ciclista. 620 también son los kilómetros que suma el entramado de carril bici en la ciudad. Berlín dispone de vías con prioridad exclusiva para los ciclistas. Los vehículos a motor solo pueden circular por ellas a 30 kilómetros por hora como máximo. De entre los sistemas de alquiler de bicicletas, destaca una opción basada en la buena voluntad del ciclista. En el punto convenido y por una cantidad simbólica, podrás hacerte con una bici si al final del día te comprometes a devolverla.
6. Dublín, Irlanda
En tan solo un año los usuarios dublineses de bicicletas públicas, que manchan de blanco y azul sus calles, han aumentado un 40%. En total, unas 50.000 personas ya son miembros de este servicio de alquiler. Para hacer frente a este boom, la ciudad ha tenido que multiplicar el número de bicis y los estacionamientos, y han proliferado los servicios destinados a todos aquellos que prefieren disfrutar de un buen paseo, lo taxis a dos ruedas.
7. Amberes, Bélgica
Bélgica es uno de los países que más importancia da al uso de la bicicleta como medio de transporte. Su terreno mayoritariamente llano facilita mucho la circulación de los ciclistas y la convierten en un destino ideal para estos. Si a eso le sumamos la cantidad de estudiantes que pueblan Amberes, la bicicleta se coloca como el transporte número uno. Manillar en mano, conocerás sus bosques, canales y prados. En el caso de Amberes, lo que marca la diferencia es el cuidado que esta localidad ha puesto en nivelar y señalizar perfectamente todas los caminos. Te será imposible perderte.
8. Ferrara, Italia
Innumerables castillos y palacios, plazas conmemorativas y una muralla renacentista han convertido a esta ciudad en patrimonio de la humanidad por la Unesco. Los habitantes de Ferrara pueden estar bien orgullosos. Pero por si esto no fuera suficiente, Ferrara cuenta además con el mayor ratio de bicicletas por habitante de todo el mediterráneo. Con una población de unos 130.000 habitantes, se cuentan unas 100.000 bicicletas. Si tienes la oportunidad de visitar esta ciudad del norte de Italia te llamará poderosamente la atención la cantidad de bicicletas que circulan pacíficamente por sus intrincadas calles. Sin tener un solo carril bici la convivencia entre peatones, coches y bicicletas es inaudita.
9. Estocolmo, Suecia
La bicicleta es definitivamente la mejor manera de circular por Estocolmo. Tanto es así que esta ciudad está mejor preparada para el ciclismo que para la circulación de vehículos. De hecho, hay rutas en bicicleta que te llevaran más rápido que un coche a los impresionantes, frondosos y verdes alrededores de la capital sueca. La ciudad tiene un servicio de alquiler de bicicletas abierto a todo aquel que lo desee, podrás coger una bici por un periodo máximo de tres horas y para acceder a este sistema de bicicletas públicas deberás adquirir antes un pase de mínimo tres días que te costará unos 12 euros.
10. Trondheim, Noruega
Quizá no sea la ciudad con más kilómetros de carril bici y sus fuertes desniveles pueden llegar a suponer un reto hasta para los más entrenados, pero este municipio pone todo de su parte para hacer de su relación con la bicicleta algo exclusivo en el mundo. Tanto es así que en Trondheim encontrarás el único ascensor para bicicletas que existe. Construido en 1993 ha sido de gran ayuda para más de 220.000 ciclistas que querían alcanzar la cima de la colina Bbrubakken, donde se encuentra el centro histórico. La ciudad ofrece además, y a diferencia del resto del país, la posibilidad de alquilar una bicicleta sin la necesidad de una subscripción anual. Solo tienes que asegurarte de tener suelto.