Diagnosticar las alergias alimentarias mediante AllerScreening
La alergia alimentaria es una enfermedad inmunológica que se ha convertido en un importante problema de salud pública. En Estados Unidos afecta al 5% de los niños menores de 5 años y al 4% de los adolescentes y adultos, y su prevalencia parece estar en aumento. Se estima que más del 6% de la población mundial, alrededor de 200 a 250 millones de personas, sufren alguna alergia alimentaria, afectando a más de 17 millones de personas sólo en Europa.
Tres millones de alérgicos europeos son menores de 25 años. El mayor aumento de alergia alimentaria se da en niños y personas jóvenes, especialmente en el número de reacciones alérgicas potencialmente mortales en niños. Por eso, es muy importante mejorar el diagnóstico de estas enfermedades para implementar tratamientos específicos lo antes posible.
El objetivo principal de este proyecto es traducir una tecnología de diagnóstico óptico ya probada, la plataforma AllerScreening, a la rutina clínica, resolviendo la necesidad sanitaria de trasladar el laboratorio a la clínica. Las características únicas de AllerScreening permitirán a los clínicos detectar preventivamente las principales alergias alimentarias (al menos el 90% de las alergias alimentarias europeas) a través de una prueba sencilla con una gota de suero, reduciendo el coste y los requisitos técnicos de la práctica clínica actual.
Este nuevo e innovador sistema de detección para el diagnóstico in vitro de los componentes de las alergias alimentarias será factible gracias a los BioKits desechables multiplexados, que permiten la detección simultánea de múltiples analitos de una muestra, y al lector óptico Point-of-Care (PoC) en el que se basa la tecnología AllerScreening, permitiendo la adopción de un nuevo dispositivo de diagnóstico in-situ, PoC por sus siglas en inglés Point of Care, que será específico de alergias alimentarias.
Este dispositivo va a permitir a los profesionales de la salud, e incluso usuarios, detectar rápidamente los componentes principales de las alergias alimentarias a través de un simple test multiplexado, aportar información precisa para confirmar o descartar el diagnóstico en cuestión de minutos de una forma más eficiente y simple que los métodos actuales, a través de un dispositivo de diagnóstico PoC libre de etiquetas.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto total de 4,7 millones de euros, está coordinado por investigadores de dos centros de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM): Araceli Díaz Perales, del Centro de Biotecnología y Genómica de Plantas (CBGP UPM-INIA) y Miguel Holgado Bolaños, del Centro de Tecnología Biomédica (CTB). Gracias a la tecnología desarrollada por ambos centros, la UPM lidera este proyecto donde los usuarios son mayoritariamente hospitales europeos.
Se añade, además, que parte de esta tecnología de diagnóstico In-Vitro está licenciada a la empresa de base tecnológica BIOD S.L creada por el grupo de Óptica Fotónica y Biofotónica para el desarrollo del producto final. Además, en él participan otras instituciones europeas, como la empresa española CQS y la alemana Microfluid ChipShop, el Servicio Andaluz de Salud y la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, la Clínica San Carlo de Milán y tres universidades europeas: Amberes, Médica de Viena y Técnica de Múnich.