Ventajas de la moto eléctrica en la gran ciudad
Ahorro en combustible
Una de las ventajas directas de una motocicleta eléctrica deriva de la naturaleza de su motor. El ahorro que supone que un vehículo eléctrico no necesite de gasolina para funcionar es considerable, recargar una moto eléctrica es más barato que llenar el depósito de una de motor convencional.
Bajo mantenimiento
Al ahorro en combustible hay que añadir el ahorro en talleres y piezas. Se puede decir que, en general, la mecánica es más sencilla. El motor eléctrico cuenta con muchas menos piezas que los motores convencionales por lo tanto el riesgo de averías es mucho menor. Además, no requiere de cambios de aceite o filtros pues no cuenta con ellos, en definitiva, el mantenimiento es mínimo para el motor.
Seguros más económicos
Al tener velocidades y alcances limitados, las aseguradoras suelen ofrecer pólizas más económicas a los vehículos eléctricos en general.
Menos impuestos
Las administraciones buscan incentivar la movilidad limpia en sus ciudades por lo que se ha incentivado con reducciones o incluso con la eliminación de ciertos impuestos a vehículos no contaminantes como el de circulación.
Sin contaminación
Al no utilizar combustibles fósiles se evita la emisión de gases y partículas contaminantes al aire de las ciudades. Si el futuro es verde, definitivamente la movilidad eléctrica ayudará a ese camino.
Sin ruido
Sin contaminación acústica para el entorno. Además de liberar al medio ambiente de partículas y gases nocivos, también libera de ruido. El aumento del tráfico en las grandes ciudades también genera problemas de salud en sus ciudadanos por el aumento del ruido y la contaminación acústica. Los motores eléctricos son completamente silenciosos a diferencia de sus homónimos de combustión interna. El ruido de un motor no volverá a ser sinónimo de potencia con estos vehículos eléctricos.
Autonomía La tecnología mejora cada año y con ello la autonomía de las baterías
Las baterías de motocicleta de litio actuales cuentan con una autonomía de entre 70 y casi 300 km, aceptan entre 1.000 y 2.500 ciclos de carga-descarga y cuentan con capacidad para ser cargadas varias veces al día si es necesario sin dañar su rendimiento.
Puntos de recarga
Las motocicletas eléctricas pueden recargarse con un punto de recarga rápido o con la red eléctrica normal de una vivienda. Muchos propietarios de vehículos eléctricos tienen un punto de recarga rápida instalado en sus hogares y la red de carga pública sigue en aumento. En España existen más de 2.500 puntos de recarga públicos a mediados de 2017 y se espera que se multipliquen a corto plazo. Además del empujón en materia de baterías que la tecnología ha dado, también se espera que el sector avance de forma precisa en este aspecto.
Estilo
El que una motocicleta lleve motor eléctrico no quiere decir que deba tener un estilo futurista. El mercado de las motocicletas ha adaptado estos motores eléctricos a todo tipo de chasis generando estilos continuistas con los estilos de las motocicletas convencionales. Así, por ejemplo, el fabricante de bicicletas y scooters eléctricas Ebroh ha creado una divertida scooter eléctrica llamada Spuma 1500W con un diseño retro – vintage que no tiene nada que envidiar a otras scooters de motor tradicional de gasolina.
Las conclusiones son claras, la movilidad urbana sigue su avance en la búsqueda por conciliar la movilidad de millones de personas y el equilibrio medioambiental a través de soluciones eléctricas e híbridas. Las motocicletas son una pieza más de ese rompecabezas y definitivamente sus ventajas son muchísimas. Las motocicletas eléctricas han llegado para quedarse y aún tienen mucho camino por recorrer.