El nivel del mar dependerá, en última instancia, de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) durante este siglo, con un incremento, a partir de 2020, de 0,2 metros por cada cinco años de retraso de las acciones para mitigar el impacto climático.
El aumento descrito es una respuesta a varios factores como la expansión de los océanos debido a la fusión de los polos, que se produciría como consecuencia del progresivo cambio climático.
El Acuerdo de París, adoptado en diciembre de 2015 y en vigor desde noviembre de 2016, tiene como objetivo limitar el calentamiento por debajo de los dos grados centígrados. No obstante, este plan no ha cuantificado cuánto crecerá el nivel del mar como resultado de hacer disminuir las emisiones contaminantes.
Matthias Mengel, líder del estudio, y el resto de investigadores han presentado modelos de simulación que muestran que si las emisiones de GEI se mantienen a cero hasta 2300 los niveles del mar crecerán hasta un máximo de 1,2 metros.
Además, es improbable que los niveles se estabilicen más allá de 2300 debido a la inercia del sistema, pese a que las temperaturas no aumenten por encima de 2 grados. Los autores del análisis aseguraron que las actuaciones que se lleven a cabo durante las próximas décadas tendrán una influencia determinante en los niveles del mar de los siguientes siglos.