Ante un foro de empresarios, la Secretaria de Estado, Teresa Ribera, ha animado a los mismos a usar herramientas de gestión ambiental para mejorar la eficiencia y la productividad de sus operaciones, lo que en definitiva repercute en la minimización de los residuos, la prevención de la contaminación y, en consecuencia, en la disminución de los gastos ambientales.
Teresa Ribera ha resaltado que «una gestión sana del medio ambiente, parte esencial del desarrollo sostenible, no es sólo una responsabilidad sino también una oportunidad para las empresas, porque la información sobre las actividades de la empresa y los impactos ambientales asociados a éstas es un vínculo importante para generar la confianza de los ciudadanos».
Además, recordó las diferentes herramientas que el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha promovido para favorecer la aplicación de sistemas de gestión medioambiental certificados externamente, como el de eco-gestión y auditoría de la Unión Europea (EMA). Al respecto ha valorado positivamente que España es en la actualidad el segundo país de la UE en cuanto al número de empresas registradas.
Las empresas juega un papel clave para el medio ambiente.
Por lo que respecta a la lucha contra el cambio climático, la Secretaria de Estado considera que es necesario impulsar un enfoque más coherente de la gestión pública del medio ambiente urbano y natural, destacando que en este punto, «la empresa puede jugar también un papel clave contribuyendo al desarrollo de una política pública útil desde el punto de vista medioambiental y eficiente en términos económicos a través de acuerdos de colaboración en iniciativas que aumenten la sensibilización y protección del medio ambiente».
Reparar el daño ambiental no es suficiente
Teresa Ribera insitió en la necesidad de un cambio de actitud frente al riesgo ambiental para lo que «es necesario extender la idea de que reparar el daño ambiental no es suficiente, sino que los daños ambientales, especialmente los irreversibles, deben evitarse».