La presencia de residuos plásticos en nuestro organismo no es ningún secreto. En junio de 2019, un estudio analizó 259 botellas de 11 marcas distintas y en 9 países diferentes detectó que el 90% de las mismas contenía microplásticos.
Por otra parte, la comunidad científica lleva tiempo alertando sobre la presencia de microscópicos residuos plásticos en el océano, una lacra que acaba afectando a los distintos peldaños de la cadena alimentaria hasta desembocar en nuestra dieta.
Proliferan los estudios epidemiológicos que alertan sobre la proliferación y efectos de compuestos como ftalatos, bisfenoles, polibromatos y parabenes, unas sustancias presentes en numerosos envases alimenticios.
Según afirma la Fundación Rezero (Fundación para la Prevención de Residuos y el Consumo) en su informe de concienciación “Salut de Plàstic” , aunque estas sustancias se puede excretar diariamente, la exposición continuada a estos compuestos tóxicos – algunos de ellos también disruptores endocrinos- puede dar lugar a enfermedades como hipotiroidismo, diabetes e infertilidad, entre otras.
Un curioso estudio de sensibilización
Para concienciar a la población sobre este problema, la fundación pidió la colaboración de 20 líderes de opinión de distintos ámbitos (desde el biólogo marino Manu San Félix hasta el pintor Miquel Barceló o la actriz Silvia Abril) quienes donaron muestras de orina en busca de compuestos plásticos.
El análisis, dirigido por el doctor Miquel Porta, catedrático y de salud pública en colaboración con el Grup de Recerca en Epidemiologia Clínica i Molecular del Càncer del Institut Hospital del Mar d’Investigacions Mèdiques (IMIM) detectó la presencia de 20 de los 27 compuestos buscados y que se dividían entre fenoles y ftalatos.
Los ftalatos son sustancias químicas artificiales empleadas como plastificante y fijador. Suelen utilizarse para incrementar la flexibilidad y elasticidad de los plásticos o bien para fijar fragancias en perfumes, ambientadores, etc.
Su presencia en la vida cotidiana está muy extendida, desde envases de plástico para alimentos hasta juguetes infantiles, papeles pinados o tintas de impresión. Pues bien, según el estudio llevado a cabo, los participantes dieron positivo en los 15 metabolitos analizados del tipo ftalato.
Por su parte, los fenoles se utilizan para dar forma y resistencia a los plásticos, y se encuentran en multitud de envases alimentarios, desde botellas de plástico hasta envases precocinados, fiambreras, etc…) así como la elaboración de resinas que protegen algunas latas de conservas. O lo que es lo mismo, este compuesto está presente en tíquets, botellas, cosméticos, detergentes, productos de limpieza…
Exposición continua a los plásticos
Según las conclusiones del informe, se ha detectado la presencia de 6 de los 12 compuestos estudiados en más del 80% de las muestras, 5 de los cuales han sido detectados en todos los participantes. Los 6 componentes más frecuentes son el MEPA (Metilparaben), OXBE (oxibenzona y ETPA (etilparaben).
A pesar de ser un estudio sin repercusión científica, sus conclusiones dan una idea de nuestra exposición a los residuos plásticos.
Según sus promotores, la finalidad es dar a conocer la dimensión de esta problemática, alentar a la población a cambiar hábitos de consumo y pedir a las administraciones públicas una regulación más estrictas en cuanto a envasado y distribución de alimentos.
Fuente: Sergi Alcalde / National Geographic,
Artículo de referencia: https://www.nationalgeographic.com.es/ciencia/detectan-hasta-21-sustancias-derivadas-plastico-hasta-orina-personas_14775,