El balance de muertos por los grandes incendios forestales que han asolado el sureste de Australia se ha elevado en las últimas horas a 208, después de que los servicios de rescate hayan podido acceder a más zonas apagadas para evaluar los daños causados por el fuego.
Un bombero muerto
Las poblaciones más afectadas han sido Marysville, con 45 muertos (casi un 105 de su población), Strathewen, con 42, y Kinglake, donde han fallecido 37 personas por las llamas. De este modo, en las últimas 24 horas ha aumentado la cifra en siete víctimas, entre ellas un bombero al ser aplastado por un árbol, informa la emisora ABC News.
El subcomisario de Marysville, Kieran Walshe, ha indicado que la Policía ya ha encontrado a todos los vecinos que se habían dado por desaparecidos, pero que las labores de búsqueda en esta localidad continuarán durante al menos una semana más.
La Policía del estado de Victoria, donde se han quemado más de 330.000 hectáreas y 7.000 personas se han quedado sin hogar, ha anunciado que no esperan encontrar muchas más víctimas mortales entre los restos de los incendios y que ya estaban cerca de establecer el número exacto de fallecidos.