Recorrido de los senderos en la Isla
El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino realizará, con cargo al Fondo Especial del Estado para la Dinamización de la Economía y el Empleo, la rehabilitación y mejora de 15 senderos en la Isla de Fuerteventura, que contempla un total de 255,06 Km de longitud. El proyecto, que se enmarca dentro de las actuaciones de la Dirección General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, abarca todos los municipios de la isla, dada la gran extensión del recorrido de los senderos, y cuenta con un presupuesto total de 2.795.859,75 de euros.
Un sendero de Gran Recorrido de más de 150 km.
Uno de los senderos es de Gran Recorrido (GR), explora la isla de forma longitudinal a través de 153,45 Km., comenzando en la Isla de Lobos, islote situado al noroeste de Fuerteventura, y terminando en la península de Jandía, al suroeste, en el poblado de El Puertito. A lo largo del recorrido, el sendero atraviesa el Parque Natural de Islote de Lobos y el Parque Natural de Jandía, así como los Monumentos Naturales de Malpaís de la Arena, Montaña de Tindaya y Montaña Cardón.
Los otros 14 senderos son de Pequeño Recorrido (PR) y le corresponden en su conjunto 101,61 Km de longitud y discurren, entre otros entornos, por el Paisaje protegido de Vallebrón y el Parque Rural de Betancuria, además de atravesar el Parque Natural de Jandía.
Isla muy árida y fuertemente influenciada por el turismo
Hay que destacar, que la Isla de Fuerteventura es la isla más árida y antigua del archipiélago Canario, y también es la más cercana a la costa africana. Se caracteriza por presentar una gran llanura salpicada de conos volcánicos de escasa altitud, y una vegetación escasa, pero con gran cantidad de endemismos debido a las peculiaridades del clima. Además, la isla cuenta con 13 espacios naturales protegidos y desde el punto de vista social, está fuertemente influenciada por el turismo, que ha dado un substancial impulso al crecimiento demográfico.
La mejora de estos Caminos Naturales, en la que el MARM viene trabajando desde hace más de quince años a través de un Programa específico, constituye una iniciativa que permite no solo ofrecer a la población un especial atractivo para la práctica de actividades vinculadas con la naturaleza y con la salud, como el senderismo o el turismo ecológico, sino que supone un instrumento de impulso del desarrollo rural sostenible, potenciando la diversificación económica
y la dinamización social del medio rural, permitiendo llegar a aquellas áreas cuyo acceso por otros medios resulta complicado.