Imagen: Pleno del Consejo Nuclear. /CSN
Prolongar la actividad de la central, una decisión que ahora depende de la decisión del Gobierno, cuesta 50 millones de euros
Por Eva San Martín
esanmartin@ambientum.com
Los cinco consejeros del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) dieron el viernes el visto bueno “a la renovación de la autorización de explotación” de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos. La más antigua de las ocho instalaciones nucleares que operan en España, en funcionamiento desde 1971.
Después de una larga semana de discusiones, el pleno presidido por Carmen Martínez Ten alargó hasta el máximo (el límite era el 5 de junio) el plazo dado por el Ministerio de Industria para conocer la opinión del organismo sobre las condiciones para que la central continúe su actividad más allá de los 40 años para la que fue programada.
El Gobierno en apuros
La decisión del consejo pone ahora en apuros al Gobierno socialista, que lleva en el programa electoral, con el que ganó las elecciones legislativas, el cierre de Garoña. La decisión debe llegar a lo largo de este mes.
El consejo, cuyo dictamen favorable no es vinculante para el Ejecutivo –sí lo habría sido en caso de ser negativo- acepta prolongar la vida de Garoña, pero impone duras condiciones. Para el organismo, la nuclear más vetusta precisa obras de hasta 50 millones de euros, antes de 2013, para asegurar “la seguridad” de sus instalaciones.
Críticas de los ecologistas
Para Ecologistas en Acción, con la prorroga de Garoña “se cumplen los peores presagios”. La asociación de defensa de la naturaleza entiende que “los propietarios [Enel, Endesa, Iberdrola] no han cumplido todas las exigencias de dicho organismo”. Y por ello no comprenden la decisión tomada por el organismo.
Garoña, que apenas produce el 1,35% de la energía eléctrica que se consume en España, se encuentra a la cola de las instalaciones nucleares más anticuadas del mundo. “En estos momentos sólo existen en el mundo 14 centrales más viejas que Garoña”, añade Ecologistas en Acción, para quien “los años no han pasado bien para la central”.