Por Alicia Ruiz de la Sierra
Un estudio de la organización no gubernamental Instituto del Hombre y del Medio Ambiente de la Amazonía (Imazon), publicado en su página web, afirma que el 86% de los crímenes ambientales contra la Amazonía brasileña permanece impune.
De 100 personas que destruyen áreas protegidas en la selva tropical solo 14 reciben sanción. De hecho, en la mayoría de los casos (la tercera parte) sustituyen la pena por castigos alternativos, como la donación de alimentos. Son algunas de las conclusiones a las que llega Imazon.
El medio centenar de crímenes ambientales en el Amazonas cometidos entre 1997 y 2006, todavía siguen abiertos.