Un grupo de investigadores del Instituto de la Grasa (CSIC) y de la Universidad de Sevilla ha confirmado que algunas plantas silvestres tienen un alto valor nutricional. Los científicos han encontrado que diversas especies de altramuces de los montes de Andalucía presentan contenidos proteicos parecidos a los de otras legumbres cultivadas, según publican en la revista Food Chemistry.
El altramuz cultivado es una leguminosa que se usa como alimento para el ganado, aunque su grano puede ser comestible si se elimina el amargor con agua y sal. Este alimento pertenece a la especie Lupinus albus, pero los investigadores se han centrado en otras seis especies que crecen silvestres en Andalucía o se cultivan de forma marginal: Lupinus angustifolius, L. cosentinii, L. gredensis, L. hispanicus, L. luteus y L. micranthus.
Resultados del estudio
Los científicos han estudiado dos aspectos principales de estos aminoácidos salvajes. Por un lado, las proteínas de sus semillas y, por otro, la digestibilidad proteica, es decir, el porcentaje de proteína digerida. La conclusión principal que se obtiene de esta investigación, es que los altramuces silvestres presentan características proteicas similares a los aminoácidos cultivados. Los datos obtenidos de las especies estudiadas muestran altos contenidos proteicos que oscilan en torno al 30%, muy similar a lo observado en otras legumbres. En relación a la digestibilidad proteica de estos altramuces, al igual que otras legumbres o cereales, es alta, en torno al 85%.
Importancia de estos estudios
Según Javier Vioque, científico del Instituto de la Grasa (CSIC), en Sevilla, para la conservación y expansión de los cultivos locales, es necesario seguir “estudiando sus características como fuente de alimentación”. Además, el investigador destaca que investigaciones como ésta “confirman el interés de estudiar poblaciones de especies silvestres, cultivadas o no, para que puedan proporcionar semillas con buenas propiedades nutricionales”.