El conjunto forestal de Andalucía, de momento, no corre peligro ante la posible enfermedad que podría sufrir debido al gusano nematodo. Este invertebrado podría causar importantes daños a los bosques andaluces, como pérdida de suelo, disminución de sumideros de CO2 y el deterioro del paisaje.
Plan de prevención
El plan andaluz de contingencia para prevenir la presencia de la larva Bursaphelenchus xylophilu trabaja sobre tres zonas diferentes de riesgo. Por un lado, en lugares como aeropuertos o muelles donde entra la madera proveniente de otros países. En esta caso, la autoridad competente es el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, MARM. Por su parte, la Junta de Andalucía se encarga de las industrias de la madera y aserraderos y de las masas forestales.
Evitar madera portuguesa
Para evitar la entrada de la enfermedad en las masas forestales que puede transmitir el gusano nematodo, las administraciones aconsejan, como medida preventiva, evitar el uso de madera portuguesa no certificada para astillas, muebles o elaboración de otros productos como palés o cajas para alimentos.
¿Por qué evitar la madera lusa?
La Consejería de Agricultura y Pesca de Andalucía realizó en 2008 varios seguimientos en 124 aserraderos andaluces. El resultado fue que alguno de ellos presentaba una situación alta de riesgo. Las causas eran por haber comprado madera portuguesa o por no tener la documentación preceptiva de esta materia prima. En este sentido, esta consejería tiene establecido un convenio con la Guardia Civil, gracias al cual se realizan controles de transportes de maderas en las carreteras