El futuro del sector automovilístico será 100% eléctrico dentro de varios años. Europa quiere implantar los coches eléctricos a partir del año 2035, mientras que en el resto de países mundiales lo harán unos años más tarde, donde los Estados Miembros de las Naciones Unidas alcanzaron un acuerdo en la ya clausurada COP27 para prohibir la venta de vehículos de combustión a partir del año 2040.
Coches eléctricos: objetivo 2030
Según el último informe realizado por BloombergNEF, enmarcado en la COP27 celebrada en Egipto, los fabricantes de las distintas marcas mundiales de coches se han marcado un objetivo: poner en circulación 43 millones de coches eléctricos para el año 2030.
A pesar de que el crecimiento será de manera gradual, al finalizar este año 2022 se habrán conseguido comercializar más de 10 millones de coches eléctricos en todos los países del mundo. China (48% de ventas) y Europa (31% de ventas) son los líderes destacados en ventas de coches eléctricos.
Los coches eléctricos suponen grandes beneficios para el medio ambiente. Permiten reducir el consumo de combustibles fósiles gracias a una mayor eficiencia energética de su tecnología. Son los únicos medios de transporte que no emiten CO2 a la atmósfera, ya que no contaminan en su conducción y mejoran la calidad del aire que respiramos día a día en las ciudades.
Las ventas de estos vehículos eléctricos han contribuido a limpiar la atmósfera, eliminando más de 150 millones de toneladas de CO2 cada año. Este dato supone una pequeña victoria para la transición energética, es una muestra de que estamos un pasito más cerca de conseguir el tan ansiado objetivo de la neutralidad de carbono.
En la actualidad, las emisiones de CO2 que emiten los coches eléctricos a la atmósfera durante su vida útil son inferiores que las emisiones provocadas por los coches de combustión interna. Los coches eléctricos producen cero emisiones cuando circulan, ya que no emiten dióxido de carbono (CO2), monóxido de carbono (CO), óxidos de nitrógeno (NOx) ni partículas en suspensión (PM), a diferencia de los coches de combustión interna.
Los secretos de un crecimiento vertiginoso
Los secretos para que los coches eléctricos crezcan de una manera tan rápida radican en que los consumidores tienen más opciones para elegir. Según el informe de BNEF, la oferta de este tipo de coches aumentó un 25% respecto al año 2020.
Otra de las cuestiones principales a tratar en este tipo de coches son la carga y autonomía. La movilidad eléctrica ha evolucionado mucho en los últimos años gracias a los avances en la autonomía de las baterías. El tiempo de carga estimado para los coches eléctricos de uso doméstico -aquellos que se cargan desde casa- es entre 4 y 8 horas.
Si prefieres reducir el tiempo de carga, o por el contrario no dispones de un sistema de carga en tu vivienda, puedes encontrar puntos de carga rápida en estaciones de servicio que te permitirán cargar tu coche al 80% en aproximadamente 30 minutos. Se espera que a finales de este año, las infraestructuras de carga para los vehículos eléctricos se acerquen al millón de puntos de carga públicos, el doble que en el año 2021.
Fuentes: Redacción Ambientum, EL PAÍS, El Periódico de la Energía,
