La etiqueta energética es un distintivo que nos proporciona las indicaciones necesarias para identificar el grado de eficiencia energética de un determinado producto a la hora de realizar nuestras compras. El 1 de marzo del año 2021 entró en vigor la nueva etiqueta energética, donde se establece una escala inicial de la A a la G, siendo «A» la que posee una mejor eficiencia energética.
La Unión Europea estableció la etiqueta energética en el año 1992. La tecnología ha ido evolucionando desde entonces, por lo que ya necesitaba una actualización que mejorase el antiguo etiquetado de eficiencia energética de los electrodomésticos con el fin de informar de una manera más clara y comprensible a los consumidores.
A continuación, les mostramos una lista de los electrodomésticos que ya poseen el nuevo etiquetado energético:
- Frigoríficos
- Lavadoras / Lava-secadoras
- Lavavajillas
- Pantallas electrónicas (se incluyen fuentes de iluminación, monitores y televisores)
- Vinotecas
¿Cuál es el objetivo y para qué sirve la nueva etiqueta energética?
El objetivo principal de la nueva etiqueta energética es reconocer de una forma más sencilla cuáles son los electrodomésticos más eficientes. Es obligatoria y nos informa sobre cuánta energía consumen los electrodomésticos, mostrando cuáles consumen más o menos energía.
Se trata de una información muy útil a la hora de comprar estos productos. El ahorro energético es uno de los motivos principales en el cambio de etiquetado energético de estos productos, ya que la nueva etiqueta energética nos permita realizar una evaluación más precisa del gasto energético de estos productos.
Para las empresas, este nuevo etiquetado energético supone un gran avance a la hora de identificar cuáles son los productos más eficientes, así como lograr los objetivos ambientales para mejorar la eficiencia energética. Las empresas no suelen usar electrodomésticos como tal, pero sí que poseen sistemas de aire acondicionado que deben llevar de manera obligatoria la nueva etiqueta energética.
La Norma ISO 50001 hace referencia al ahorro económico y energético dirigido a las empresas a la hora de implantar este sistema:
¿Cuáles son las diferencias entre el antiguo y el nuevo etiquetado energético?
La principal diferencia entre la antigua etiqueta energética y la nueva etiqueta energética es la escala. En la etiqueta antigua, la escala iba desde la «A+++» hasta la «D», siendo la «A+++» la más eficiente y la «D» la menos eficiente de un determinado producto. En la nueva etiqueta, la escala de eficiencia energética va desde la «A» hasta la «G», siendo la «A» la más eficiente y la «G» la que posee una menor eficiencia energética.
Es muy importante tener en cuenta que no podemos hacer una comparación entre ambas etiquetas, porque no existe una equivalencia exacta entre los datos que nos aporta la antigua y la nueva etiqueta energética. Con la nueva etiqueta, cambian los parámetros de medición, ya que las antiguas etiquetas no medían con total precisión el uso cotidiano de los electrodomésticos. Sin embargo, el nuevo etiquetado energético mide con mayor exactitud todos estos parámetros.
En la siguiente tabla, les mostramos las diferencias entre la antigua y la nueva etiqueta energética:
Etiqueta energética antigua | Etiqueta energética nueva |
A+++: Es el mayor nivel de eficiencia energética. Su consumo de energía es inferior al 25% y se representa con un color verde oscuro. | A: Es una etiqueta que hace referencia a aquellos electrodomésticos que poseen una alta eficiencia energética desconocida hasta ahora. |
A++: El consumo de energía de los electrodomésticos es inferior al 25% y se representa con el color verde. | B: Coincide con la etiqueta A+++, ya que se representa con el color verde oscuro. |
A+: El consumo de energía de los electrodomésticos generan un consumo de entre el 30% y el 40% y se representa con un color verde más claro. | C: Coincide con la etiqueta A++, ya que se representa con un color verde más claro. |
A: El consumo de energía de los electrodomésticos oscila entre el 40% y 55% y se representa con el color amarillo. | D: Coincide con la etiqueta A+, dado que se representa con el color amarillo. |
B: El consumo de energía de los electrodomésticos oscila entre el 55% y el 75% y se representa con el color naranja. | E: Coincide con la etiqueta A, dado que se representa con el color naranja. |
C: El consumo de energía de los electrodomésticos oscila entre el 75% y el 90% y se representa con el color naranja intenso. | F: Coincide con la etiqueta B del antiguo etiquetado, puesto que se representa con el color naranja intenso. |
D: Es una etiqueta que muestra los electrodomésticos menos eficientes. Generan un consumo de energía que oscila entre el 90% y el 100% y se representa con el color rojo. | G: Se representa con el color rojo. La diferencia con el antiguo etiquetado es que el consumo de energía que generan los electrodomésticos oscila entre el el 75% y el 100%, correspondientes al grupo C y D. |
Una de las grandes ventajas del nuevo etiquetado energético es que podemos encontrar cuál es el consumo de agua de un producto determinado, la duración de los programas y el ruido de centrifugado.
Otra de las diferencias que podemos encontrar en el nuevo etiquetado energético es que aparece un código QR. Lo podemos escanear con nuestros móviles para obtener una información más detallada de un determinado producto. A diferencia del nuevo etiquetado, los pictogramas del antiguo etiquetado energético no aparecían con ese nivel de detalle.
Por último, es importante destacar que esta nueva clasificación energética dejará espacio a nuevos desarrollos tecnológicos. Los productos tecnológicamente más avanzados como las clases más eficientes (A y B) contarán con una clasificación adecuada a su eficiencia energética.
Fuentes: Redacción Ambientum, OCU, MITECO, Selectra