U
El programa se inició en 2003 con financiación alemana, y su éxito se basa en una combinación de elementos integrados, como piensos mejorados, acceso a la inseminación artificial o toros de cría, mejora de los servicios veterinarios y una mejor organización. El enfoque se denomina Plan Lácteo Integrado
Puntos de ventaLos expertos de la FAO enseñaron a los campesinos a organizarse en cooperativas que colectan la leche y suministran servicios veterinarios y ganaderos a sus miembros. Las cooperativas operan también plantas procesadoras, que pasteurizan la leche y obtienen productos derivados como yogur, leche fermentada, mantequilla y ghee (mantequilla clarificada), y gestionan puntos de venta en las principales ciudades. De esta forma los campesinos cuentan con una salida garantizada a su producción.
Los productores de leche y sus familias no son los únicos beneficiados. Al tiempo que muchos más afganos tienen acceso a productos lácteos frescos y saludables, el éxito del proyecto ha hecho mucho más rentable para los campesinos producir forraje como la alfalfa, de la que pueden obtener hasta 900 dólares/hectárea, y puede llegar a competir con la producción de cultivos ilícitos.
Problemas de seguridadA pesar de que la demanda local de productos lácteos frescos es elevada, los problemas de seguridad, en particular en el sur del país, limitan un crecimiento rápido del programa. Pero el año pasado el Gobierno italiano decidió donar 2 millones de dólares EE.UU. para ampliar el proyecto en la provincia de Herat. El Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Banco Mundial también están dando pasos con amplios programas para extender el plan IDS.
La iniciativa en el sector lácteo forma parte de un esfuerzo más amplio de la FAO para revitalizar el sector agrícola afgano, muy dañado por la guerra. "Incrementar los ingresos de los campesinos obtenidos del cultivo de cereales, la horticultura y la producción láctea, ofrece a largo plazo una alternativa viable a la producción de adormidera", afirma Tekeste Tekie, el Representante de la FAO en Afganistán.
n plan para el sector lácteo iniciado por la FAO en Kabul y cuatro provincias afganas: Logar, Wardak, Mazar y Kunduz, ha tenido tanto éxito, que las 1.600 familias que participan han visto sus ingresos quintuplicados, desde 130 a 650 dólares EE.UU. anuales. Y siendo las mujeres las que realizan la mayor parte del trabajo, se quedan con el 95 por ciento del dinero.