La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) propuso hoy estrategias de producción agrícola y ganadera basadas en el aprovechamiento de la biodiversidad propia de cada zona de producción, para mitigar las emisiones de gases de CO2 y adaptarse a los cambios que genere el cambio climático.
La organización presentó la iniciativa Agricultura Socioconsciente, donde uno de sus pilares fundamentales es el desarrollo del trabajo en explotaciones agrícolas y ganaderas, que garantiza la rentabilidad y una estabilidad a sus titulares, y les proporciona «condiciones justas» para todos sus trabajadores.
CALIDAD Y USO EFICIENTE DEL MEDIO NATURAL
Igualmente, apostó por una agricultura enfocada en la producción de alimentos de calidad que garantice el abastecimiento y la seguridad alimentaria, que apoye el mantenimiento de variedades locales y razas autóctonas, y que tenga como fin último la defensa y el desarrollo del medio rural vivo.
Además, planteó una agricultura basada en el respeto, la conservación y el aprovechamiento racional y eficiente de los recursos naturales y de producción, con el objetivo de minimizar los efectos adversos sobre el medio ambiente y contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.
En la misma línea, la subdirectora de la Oficina para el Cambio Climático, Concepción Martínez López, indicó que el papel de la agricultura en la lucha contra el cambio climático tiene una «doble vertiente» ya que, «puede reducir las emisiones», y como sector, «como el clima está cambiando tiene que adaptarse a ellos».
Asimismo, explicó que los ecosistemas naturales pueden verse «muy afectados» con la subida de las temperaturas por el cambio climático, y como consecuencia pueden aumentar los brotes de insectos, los incendios, el daño en los cultivos, registrarse una menor productividad, una degradación de la tierra y un incremento en las sequías.
11% DE EMISIONES DE GASES DE EFECTO INVERNADERO
El secretario general de COAG, Miguel Padilla, explicó que el sector agrario contribuye al cambio climático con un 11 por ciento de emisiones de gases de efecto invernadero, y que por ello, «hay que tener en cuenta que los bosques, tierras agrícolas y otros ecosistemas terrestres ofrecen un gran potencial para mitigar los efectos de la emisión de CO2 a la atmósfera».
En este sentido, apuntó que los ecosistemas pueden contribuir a los objetivos de mitigación mediante prácticas agrícolas sostenibles, que reducen la emisión de gases, técnicas de mínimo laboreo, aprovechamiento de tierras, y métodos de producción ecológicos que ayudan a retener CO2 y a reducir la emisión de GEI, y comentó que los espacios agrícolas «son un sumidero para el carbono», debido a su capacidad de absorción de CO2.
Finalmente, resaltó que la contratación de los seguros para los agricultores se ha visto afectada por el cambio climático. «Antes se fijaban unos períodos de tiempo para la cobertura del seguro que ahora no nos sirven porque llueve o graniza en cualquier momento», concluyó.
