Al menos diez personas han perdido la vida en los últimos días debido a las inundaciones que han azotado la zona centro de Estados Unidos, y que además ha provocado numerosos daños materiales, según informaron medios locales recogidos por Europa Press.
Las lluvias torrenciales que han caído durante todo el fin de semana pasado han afectado principalmente los estados de Indiana, Michigan, Iowa, Nebraska y Wisconsin, donde se ha creado un nuevo afluente del río principal, de acuerdo con la oficina de Sheriff del condado de Columbia.
El gobernador de Wisconsin, Jim Doyle, solicitó ayuda de emergencia para 29 condado, cuando todavía no se ha cumplido un año de las fuertes lluvias que azotaron este estado y de las que todavía se están recuperando.
"Es horrible. No hay forma de que lo podamos parar", dijo Thomas Diehl, un vecino de la localidad de Lake Delton. "El volumen de agua es tan alto que no hay nada que podamos hacer", añadió Diehl.
Ante la gravedad de la situación, el Ejército estadounidense, que se ha desplazado hasta las zonas más afectadas para colaborar con las ayudas de limpieza, afirmó ayer que intentaría bloquear 250 millas del río de Mississippi, desde las localidades de Fulton hasta Clarksville.
Asimismo y debido a las inundaciones muchos habitantes de la zona han tenido que ser evacuados cuando el nivel del agua ya llegaba a la altura de las rodillas.
Mientras tanto, las temperaturas aumentan en el este del país por lo que millones de personas demandan que se instaure de nuevo la electricidad para poder conectar el aire acondicionado.
Como consecuencia de la fuerza del agua, muchas casas han sido arrastradas por la corriente hacia las carreteras, sobre todo en Wisconsin, donde 24 personas fueron rescatadas. Asimismo, en el estado de Indiana un hombre se ahogó dentro de sus vehículo mientras viajaba en el sur de Indianápolis.
