El portavoz del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea Regional de Murcia, Juan Carlos Ruiz, suscribirá hoy, en representación de este partido por Murcia, el documento en favor de la puesta en marcha de un Pacto Nacional del Agua. En la firma del documento participará también el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Francisco del Amor.
De este modo, el PP respaldará el documento elaborado por los agentes sociales y económicos, las organizaciones agrarias de la Región de Murcia y los representantes de los regantes de Alicante, Almería y Murcia en el que se propone un gran pacto del agua que incluya los trasvases, según informó el PP en un comunicado.
Al respecto, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular recordó, en un comunicado, que incluso "antes de que estuviera elaborado este documento, ya se anunció que contarían con nuestro apoyo", ya que, recalcó, "el PP ha mostrado en todo momento su voluntad de poner en marcha un Pacto Nacional del Agua que contemple todas las alternativas, incluidos los trasvases, sin exclusiones, para que la Región tenga el agua que necesita".
Es por ello por lo que dejó claro que "el PP no renuncia a sus principios, sino que los refuerza", porque, opinó, "la política de agua requiere de un gran pacto entre todos, que contemple los criterios de unidad de cuenca, la solidaridad interterritorial, la sostenibilidad medioambiental, la prioridad de uso en la propia cuenca, así como la garantía de las necesidades presentes y futuras".
Asimismo, subrayó que "estos principios ya quedaban reflejados en el Plan Hidrológico Nacional, que contó con el apoyo de la mayoría del Consejo Nacional del Agua y de Comunidades Autónomas gobernadas por el PSOE".
Finalmente, Ruiz insistió que el PP "siempre ha estado del lado de los regantes y los agentes sociales para reivindicar el agua que la Región precisa y, una vez más, vamos a mostrar nuestro apoyo".
Interconexión de cientas.
Este documento se presentó el pasado jueves y en el mismo, los integrantes proponen un gran pacto de Estado del Agua en el que, entre otras medidas, hasta un total de diez, abogan por la interconexión de cuencas, aunque no concretan cuales.
De igual modo, señala que que "las transferencias de aguas constituyen en la actualidad la gran asignatura pendiente que impide realizar, a medio y largo plazo, una planificación hidrológica estatal que posibilite la superación de los déficits existentes".
Al tiempo que indica que "en la actualidad asistimos a un debate basado en una pretendida territorialidad y patrimonización" del agua, lo que "está generando tensiones y posiciones encontradas". Esto es lo que "hasta la fecha ha obstaculizado poder alcanzar una solución".
El documento incluye un decálogo en el que se afirma que "el agua es un bien público escaso", sin embargo "es escaso y con desigual distribución geográfica", por lo que "corresponde a los poderes públicos, y especialmente al Gobierno de la Nación, garantizar su disponibilidad en condiciones adecuadas de cantidad y calidad", así como "a un coste asequible para cada uno de los usos", reclama.
Además, reconoce que "la eficacia y eficiencia en la gestión del agua" deben primar en la política hidráulica; al tiempo que critica que "la politización territorial del agua esté dando lugar a graves tensiones que generan problemas de insolidaridad".