La Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, ha participado hoy en la Conferencia "Agua y Desarrollo Sostenible" que, organizada por la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea, se ha celebrado en Zaragoza, donde ha explicado la importancia de una agricultura racional y un uso eficaz de los recursos hídricos en España, para asegurar su sostenibilidad y futuro.
Elena Espinosa ha abordado la importancia macro y microeconómica del regadío en España, partiendo de la evidente dependencia económica y social existente entre el territorio y la agricultura de regadío. Una relación que, ha indicado la Ministra, trasciende, con mucho, su limitada superficie, ya que no llega al 15 por ciento de la Superficie Agraria Útil, pero en la que se produce más del 60 por ciento de la producción vegetal agraria.
El efecto de arrastre que tiene el sector primario, ha añadido Elena Espinosa, y especialmente el regadío, es esencial en la economía y en el resto de las actividades, especialmente la industria agroalimentaria, teniendo un efecto multiplicador tanto en producción, como en renta y empleo.
La Ministra ha planteado las características e implicaciones de dos modelos diferenciados en los sistemas agrarios de regadío en España, los regadíos de interior, vinculados a cultivos extensivos de orientación productivista, con márgenes netos relativamente bajos, de poco mas de 300 euros por hectárea, y sostenidos principalmente por la PAC, cuya presencia está ligada al mantenimiento de la población y a una actividad económica mínima, determinante para el medio rural en determinadas regiones.
Frente a ellos, otro modelo más dinámico y competitivo, el de los regadíos del Levante mediterráneo, principalmente los de orientación hortofrutícola de una altísima rentabilidad, con márgenes superiores a los 6.000 euros por hectárea, en los que no se cuenta prácticamente con ayudas comunitarias. Un modelo, ha señalado la Ministra, en el que la disponibilidad de agua juega un papel decisivo en el desarrollo de la actividad agraria y de la economía regional.
Partiendo de la evidente importancia del regadío en España, Elena Espinosa ha indicado que se plantea la necesidad de lograr la complementariedad y sostenibilidad, con una agricultura racional, donde prime la eficiencia, especialmente en ese uso del agua, lo que pasa por modernizar los sistemas de regadío existentes.
Una modernización, ha destacado la Ministra, que ha de tener en cuenta la Directiva Marco del Agua, y que desde hace muchos años se viene vinculando a la programación comunitaria de Desarrollo Rural, tal como demuestra la inclusión de la medida "Recursos Hídricos" dentro de las cinco medidas horizontales del Marco Nacional para el periodo 2007/2013, mediante la que se espera invertir más de 900 millones de euros en modernización de regadíos, 400 de los cuales aportados por la Unión Europea.
Tras recordar que, en ese camino hacia la sostenibilidad de la agricultura y los recursos hídricos, el reto es buscar fórmulas innovadoras que aúnen crecimiento económico y protección del medio ambiente, Elena Espinosa ha subrayado que los datos de los últimos años ponen ya de manifiesto que la agricultura es el único usuario que está conteniendo, e incluso descendiendo su consumo de agua, pasando de utilizar entre el 73 y el 80 por ciento de los recursos hídricos del país hace años, a un 63 por ciento en la actualidad.
En esta línea, la Ministra ha subrayado que se esta produciendo un profundo proceso de cambio en la agricultura y su regadío, lo que será determinante para lograr esas sostenibilidad del uso de los recursos hídricos en el país para el futuro.