Sólo el 2,5% del agua del planeta es apta para el consumo, la industria o la agricultura. Ante este dato, y la vital dependencia del recurso natural más importante, es muy necesario saber cómo tratar y reciclar agua ya que es un bien cada día más escaso.
Una de las formas más fáciles y eficaces de reciclaje del agua, es recuperar este vital recurso cuando sucede ese gran fenómeno de la naturaleza que llamamos lluvia. Es importante decir que estas aguas que podemos recuperar no son aptas para el consumo humano si no las potabilizamos, pero sí que son perfectamente útiles para regar, la limpieza del hogar y otro tipo de tareas que requieran agua.
Reciclaje con pozos
Para ello, la opción más común es la construcción de un aljibe o de un pozo, que serviría de depósito para este recurso natural. El agua suele recuperarse de los techados que se encuentran en las casas, y mediante una serie de canalizaciones se la lleva hasta el depósito.
Una vez allí y con la ayuda de un mecanismo de extracción, como puede ser una bomba, podríamos utilizarla. Esta práctica es bastante común en los chalets y las fincas rurales, ya que suponen un ahorro sumamente importante en los riegos de los jardines y de las plantas.
Sistemas de filtrado de agua
Si no dispones de un terreno, la opción pasa por utilizar un sistema biológico-mecánico en forma de filtros como AquaCycle.
Estos sistemas permiten recuperar el agua de la ducha y los lavabos, para depurarla y utilizarla posteriormente en otros usos en el hogar, como los lavavajillas o incluso para la cisterna de nuestro lavabo.
Se estima que se puede conseguir un ahorro de cerca de 90000 litros anuales, en una vivienda familiar con 4 personas.
Fuente: Inforeciclaje,
Artículo de referencia: http://www.inforeciclaje.com/reciclaje-agua.php,