Técnicos de la empresa Hidraqua han detectado un incremento de la presencia de nitrógeno en las aguas residuales a partir de un estudio llevado a cabo en varias depuradoras. Después de analizar cientos de muestras el equipo integrado por Vicente Monteagudo, Maria Gurrea y Ana Gómez ha concluido que existe un aumento del nitrógeno que procede de los vertidos de origen doméstico.
La causa está en los cambios que ha experimentado la alimentación en los últimos tiempos, en la composición de los fertilizantes para frutas y verduras, en la abundancia de compuestos nitrogenados procedentes de productos de limpieza que llegan a la red de saneamiento y en que cada vez más se utiliza el desagüe como basurero al fregar los platos. Además el consumo medio de agua por habitante y día se ha visto sensiblemente reducido en los últimos años, lo que contribuye a aumentar la concentración de nitrógeno en los vertidos.
Cambiar la normativa
Esta mayor presencia de nitrógeno en las aguas residuales podría determinar cambios en la normativa sobre residuos y en el diseño de estaciones depuradoras para evitar que suban los niveles de contaminación en los ríos y las zonas húmedas. El fósforo y el nitrógeno que se vierten a los ríos son los principales responsables del proceso conocido como eutrofizacion, que afecta a espacios como la Albufera. Ambos elementos, en grandes cantidades, alimentan las microalgas que consumen el oxígeno y hacen que el agua pierda la transparencia. Ello conduce a la reducción de las especies y al deterioro de los ecosistemas.
El estudio de Hidraqua se inició en Paterna y se ha ampliado después a las depuradoras de Silla, Riola y Cullera. Concluye que los cambios experimentados en los hábitos alimenticios de los valencianos, especialmente por aumento del consumo de proteínas, y el uso de determinados productos de limpieza, han originado un incremento desmesurado del porcentaje de nitrógeno en las aguas residuales.
El aumento del nitrógeno ha sido tan acusado que durante un tiempo la Confederación Hidrográfica del Júcar y la Entidad Metropolitana de Saneamiento lo atribuyeron a vertidos industriales en el alcantarillado urbano de Paterna. El estudio de Hidraqua pudo demostrar que no era así, gracias a la existencia de colectores diferenciados para unos y otros vertidos. El estudio de vertidos en otras poblaciones evidenció que es el de origen doméstico el que está cambiando la composición del agua por el uso generalizado de fertilizantes en el cultivo de frutas y verduras y el mayor consumo de proteínas en la dieta.