El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA) lanzó oficialmente el Año Internacional de los Arrecifes de Coral la semana pasada en Fiji.
Durante la ceremonia el Primer Ministro de ese país anunció que nominó grandes porciones de sus arrecifes coralinos como sitios Ramsar, para protegerlos de amenazas como el cambio climático, los desechos químicos y las aguas residuales.
Un sitio Ramsar es designado bajo una Convención que sirve de marco para acciones nacionales y de cooperación internacional para conservar y hacer un uso racional de los cuerpos de agua. En la inauguración el PNUMA también presentó una nueva alianza con Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) de respuesta urgente para combatir el daño de los corales.
«Este es un año decisivo para los arrecifes de coral del mundo», dijo Erik Solheim, jefe del PNUMA. «Tenemos una ventana corta en la que podemos actuar, y las Naciones Unidas, WWF y países como Fiji están haciendo un llamamiento al mundo para que tome las medidas que solucionarán el problema este año» agregó.
El PNUMA además anunció el lanzamiento de un análisis detallado del estado de los arrecifes de coral del Pacífico. El informe que será publicado próximamente, está basado en datos de 128 islas, cubre 19 países o territorios y cuya investigación incluyó más de 20,000 encuestas, muestra que los arrecifes del Pacífico están generalmente en mejor forma que muchos otros en todo el mundo, pero la estructura y los tipos de corales en esta región están cambiando.
Estos cambios afectan los servicios ecosistémicos proporcionados por los arrecifes, especialmente su productividad pesquera. En las últimas tres décadas, la mitad de los corales del planeta ha muerto debido al aumento de la temperatura del agua y la acidificación de los océanos. Otras amenazas para los arrecifes de coral son la contaminación con nutrientes, sedimentos y plásticos y la sobrepesca.