Sigue los pasos de Caribú, el lince liberado en Doñana. Pincha aquí
Dos cámaras instaladas en Doñana permiten ver desde ayer a «Caribú», el lince macho liberado ayer en una zona cercada en el Santa Olalla, en pleno corazón de Doñana.
La vida del lince podrá seguirse por internet mediante un equipo tecnológico desplegado por la Estación Biológica de Doñana (EBD) en este espacio protegido.
Desde el portal se puede acceder a la vista de las dos cámaras que emiten imágenes del lince en tiempo real (auqnue con poca deficnición).
La consejera andaluza de Medio Ambiente, Cinta Castillo, ha destacado la apuesta por la transparencia y por las nuevas tecnologías que suponen estos enlaces, fruto de la colaboración de su departamento con la EBD.
La liberación del lince
Este traslado -translocación, según la terminología científica- es el segundo que se realiza en Doñana tras el de “Baya”, otro macho de Sierra Morena liberado el 21 de diciembre del pasado año en la zona de Coto del Rey, al norte de este espacio protegido, donde se apareó con tres hembras que parieron ocho cachorros, de los que al menos sobreviven dos.
La liberación de ambos linces responde a diez muertes producidas el año pasado por un brote de leucemia felina que descompensó la población de Doñana, en la que las hembras duplican a los machos. Con esta iniciativa, «mejorará la escasa variabilidad genética de estos felinos, que padecen una gran consanguineidad por su elevada endogamia», según ha explicado el director del programa LIFE de conservación del lince ibérico, Miguel Ángel Simón.
Cinta Castillo, quien ha abierto la jaula desde la que “Caribú” ha salido a un cercado de 6 hectáreas, ha expresado su “emoción” por asistir a esta liberación y ha confiado en que sea tan exitosa como la de “Baya”.
Período de prueba
“Caribú” permanecerá en el interior de este cercado, dotado de cámaras de televisión e infrarrojas y que cuenta con alimentación suplementaria de conejos, varias semanas hasta que los técnicos comprueben que se relaciona adecuadamente con las dos hembras asentadas en esta zona, momento en el que se abrirá el cercado para que los lince inicien el celo en libertad.