El proyecto parte de una revisión de las medidas agroambientales aplicadas, que son financiadas desde Bruselas cuya dotación presupuestaria debería ser aumentada para ser suficientemente atractivas para los agricultores.
Las conclusiones preliminares más destacables de la iniciativa son que las medidas muestran efectos ambientales positivos en la mayoría de los caso; que las ayudas de la PAC financiadas por la UE no presentan un interés económico suficiente, y deben mejorarse la información y el asesoramiento en cantidad y calidad.
El acto ha contado con la presencia de Jesús Casas, Director General de Desarrollo Sostenible de Medio Rural del MARM y Eduardo de Juana, presidente de SEO/BirdLife. Ambos han coincido en que la población de las aves esteparias saldrán beneficiadas con este proyecto.
Aves esteparias, cultivos y agroambientales
El Director General apoyó el proyecto desde el principio, al entender que potenciar el valor ambiental de gran parte de la superficie agraria del país es una oportunidad para avanzar hacia un desarrollo territorial sostenible.
Eduardo de Juana, por su parte, ha mencionado que “es necesario trabajar por el mantenimiento de estos cultivos en España, ya que representan los principales hábitats de muchas aves amenazadas de Europa, que tienen aquí sus mayores poblaciones”.
Las gangas, la avutarda, el sisón, la codorniz o la calandria son algunas de las especies ligadas a los sistemas herbáceos extensivos de secano, cuyo declive refleja la difícil situación de estos cultivos, sometidos a intensificación o en proceso de abandono.
El proyecto Ganga
El proyecto Ganga pretende contribuir a la conservación de las aves que viven en los cultivos herbáceos de secano extensivos, con los que mantienen una relación de dependencia. Prácticas tradicionales como el barbecho o las rotaciones, y elementos habituales, como la vegetación espontánea de las lindes, son algunos factores clave.
Las medidas agroambientales deben ser una herramienta útil para hacer viables estos cultivos mediante el fomento de una gestión favorable, y conservar así las aves esteparias en beneficio de la biodiversidad y del medio rural.
En definitiva, el proyecto pretende aumentar la eficacia de las medidas agroambientales dirigidas a cultivos herbáceos de secano, tanto para la conservación de las aves, como para recompensar adecuadamente el compromiso de los agricultores.
Un objetivo que contribuiría a su vez a las metas europeas de frenar la pérdida de biodiversidad, mejorar la gestión de la Red Natura 2000 y apoyar a los sistemas agrarios de alto valor natural (SAVN).
La evaluación de las medidas en el campo es una de las principales actividades del proyecto. Se estudian más de 300 parcelas en Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Por su parte, la propia difusión de las medidas es un factor importante, ya que la falta de información o el uso de métodos poco adecuados o insuficientes pueden limitar la acogida por parte de los agricultores.