Unos 200 millones de golondrinas comunes vuelan cada año de Eurasia a África. La golondrina común es una de las aves más populares de España. Habita en nuestros pueblos y ciudades donde se alimenta de insectos que caza en vuelo. Construye sus nidos en nuestras terrazas, garajes, establos, granjas, etc. Desde mediados de septiembre nuestras golondrinas se marchan muy lejos, ya que durante el invierno en España no tiene suficiente alimento para sobrevivir.
Aunque este migrante transahariano ha sido anillado con frecuencia en España, con más de 600.000 aves marcadas y más de 5.000 aves recuperadas con anilla, solo hay constancia de unas pocas recuperaciones en África, con lo que las zonas de invernada en el continente africano de las poblaciones españolas son aún una incógnita, al igual que los detalles de sus movimientos migratorios. El empleo de pequeños geolocalizadores de menos de0,6 gramosde peso y dispuestos en la espalda de estas pequeñas aves, ha permitido por primera vez en España conocer sus movimientos, rutas migratorias y zonas de invernada, necesarios para conocer su biología y facilitar la conservación de esta especie.
Invernando en el sabana sudanesa
En la primavera de 2012 miembros del Grupo Ornitológico SEO-Monticola, perteneciente a SEO/BirdLife, marcaron 20 golondrinas en una colonia ubicada en el aparcamiento subterráneo de coches dela Universidad Autónoma de Madrid. Esta última entidad ha apoyado el estudio financiando los dispositivos y facilitando el trabajo en el campus universitario.
Durante la primavera y el verano de 2013, tras un intenso trabajo de búsqueda y captura, se han recapturado dos aves marcadas con esta moderna tecnología (es preciso recuperar el aparato para descargar la información) y, afortunadamente, han registrado sus movimientos durante todos los meses que han pasado fuera de sus zonas de cría. Los análisis preliminares de estos datos están comenzando a desvelar sus movimientos a lo largo de todo un año e identificar las áreas importantes para la especie fuera de España.
"Las aves abandonaron el campus universitario en la primera quincena de septiembre de 2012. Invirtieron unos 40 días en su viaje migratorio hasta la zona de invernada y migraron una media de 70-110 kmal día hasta que alcanzaron su área de invernada a mediados de octubre. La zona en la que invernaron fueron zonas de sabana y bosque tropical en África occidental en Burkina Faso, Costa de Marfil, Ghana y Malí. Una de las aves pasó todo el invierno en la misma zona y la otra estuvo en dos zonas separadas unos 500 km. A mediados de febrero iniciaron el viaje de vuelta que realizaron por una ruta muy recta hasta el estrecho de Gibraltar con una velocidad mayor que en otoño y una media de 100-140 kmal día. Volvieron al campus universitario madrileño a mediados de marzo. Las aves tardaron unos 30 días en completar su viaje de primavera. Cada golondrina tuvo que volar unos 3.500 kmde distancia en cada viaje migratorio" informa Jorge Fernández, biólogo encargado de analizar la información recogida por los geolocalizadores y miembro del Grupo Ornitológico SEO-Monticola. El viaje de estas dos golondrinas puede consultarse en: www.migraciondeaves.org
"La invernada en estas áreas tiene importantes consecuencias", afirma Javier de la Puente, técnico del Área de Estudio y Seguimiento de Aves de SEO/BirdLife y uno de los responsables del programa Migra. Por ejemplo, la cantidad de lluvia en el Sahel está correlacionada con las fluctuaciones en las poblaciones de golondrina en Europa. También, hay una caza masiva de golondrinas en algunos dormideros en países (algunos de más de un millón de aves) como Nigeria, Camerún y República Centroafricana que no parecen tener un impacto importante en las poblaciones. En el año 1999 una golondrina se vendía a 0,15 euros en algunos mercados de estos países. Las principales mortalidades las producen las sequías en las áreas de invernada, y cruzar en sus migraciones el Sahara y el Sahel. También las prácticas agrícolas poco compatibles con la conservación de la biodiversidad en toda Europa, intensificación agraria y fuerte uso de pesticidas, que podrían ser las causantes del fuerte declive de la golondrina en España en las últimas décadas tal y como ha puesto de manifiesto el programa Sacre de SEO/BirdLife con un declive del 40% desde 1998.
Tecnología de menos de un gramo
Los geolocalizadores son unos pequeños aparatos de seguimiento remoto, que gracias a un sensor registran la cantidad de luz donde se encuentra el ave, lo que permite estimar su posición mediante fórmulas astronómicas a partir de la hora de amanecer y anochecer y del número de horas diarias de luz. Esta tecnología, más propia de las modernas películas de espías que del estudio de las aves, está disponible en aparatos de menos de1 gramode peso, lo que permite su uso en especies muy pequeñas, como la golondrina común.
Pero esta moderna tecnología no está exenta de algunas desventajas. La principal es que es preciso volver a recapturar el ave y retirarle el aparato para poder descargar la información sobre sus periplos migratorios. Además, las localizaciones, obtenidas con un laborioso proceso de análisis, pueden tener un error de algunas decenas de kilómetros, aunque a pesar de ello reflejan las trayectorias de sus viajes mejor que ninguna tecnología anterior. De momento es el único sistema de seguimiento remoto que se puede emplear en aves de tan pequeño tamaño, mientras los nuevos avances tecnológicos no pongan a nuestra disposición nuevos y más precisos aparatos.
Programa Migra
El programa Migra, puesto en marcha en 2011 por SEO/BirdLife con la colaboración dela Fundación Iberdrola, incorpora las últimas tecnologías en sistemas de geolocalización y seguimiento remoto para conocer con mayor detalle los movimientos de las aves dentro y fuera de nuestro país. Con esta tecnología puede conocerse la fecha de inicio y fin de sus migraciones, los lugares de parada y puntos de alimentación, el tiempo que tardan en realizar esos viajes, si se repiten en la migración primaveral y otoñal, las principales áreas de invernada y dispersión, o si las rutas son iguales año tras año.