Cerca de 9.000 días en el mar y más de 540 expediciones han permitido realizar un resumen de una década de observación e investigación, un mapa de la vida de los océanos, y dos libros que se publicaron oficialmente ayer, para mostrar la biodiversidad, distribución y abundancia de la vida marina.
Según los científicos de 670 instituciones que han participado al Censo de la Vida Marina, que ha contado con un presupuesto de 650 millones de dólares americanos, la vida en los océanos es más rica, está más conectada y más alterada de lo que se pensaba. Toda la información recogida a lo largo de la última década se presenta hoy en forma de informes, libros y mapas que coronan diez años de descubrimientos.
Con 30 millones de observaciones, el mayor equipo de investigadores muestra la biodiversidad marina de 120.000 especies clasificadas en la mayor base de datos de la vida del océano, también llamada el "macroscopio", el Sistema de Información Biogeográfica del Océano (OBIS, en sus siglas en inglés).
Un océano más rico, más conectado, más afectado y menos explotado
"El primer Censo de la Vida Marina documenta un océano cambiante, más rico en cuanto a su diversidad, más conectado a través de su distribución y movimientos, más afectado por los humanos, y menos explorado de lo que se pensaba", ha afirmado Jesse Ausubel, cofundador del Censo y director de la Fundación Alfred P. Sloan.
Las exploraciones de hasta 10.000 metros de profundidad y la ubiquidad descubierta de ciertas especies demuestran que los océanos están conectados. Pero el trabajo también muestra ciertos declives y recuperaciones de algunos animales.
"Este viaje de cooperación internacional del siglo XXI ha definido por primera vez y sistemáticamente lo conocido y el desconocido e inexplorado océano", ha declarado Ian Poiner, presidente del comité científico del Censo.
Ciudadanos del mar
"Toda la vida en la superficie depende de la vida en los océanos porque proporciona la mitad del oxígeno, y mucha de nuestra alimentación, y regula el clima. Todos somos ciudadanos del mar, y mientras desconocemos todavía mucho, incluyendo al menos unas 750.000 especies, ahora estamos más informados", ha señalado Poiner.
Desde microbios hasta ballenas
El censo recoge información desde microbios hasta ballenas. Los científicos estiman ahora que más de un millón de especies habitan en los océanos, y sólo unas 250.000 están descritas en la literatura científica. Desde 2000, año en el que se inició el Censo, se han descubierto unas 16.000 nuevas especies, de ellas, 1.200 han sido descritas por los científicos del censo.
"Antes del Censo, carecíamos de incluso una simple lista de especies marinas conocidas. La información estaba aislada en todo el mundo con un acceso limitado", ha explicado Patricia Miloslavich, científica venezolana del Censo.
Sin embargo, los investigadores estiman que de sus exploraciones quedan unas 5.000 especies por describir (un 10% de ellas en Europa, un 38% en África, entre un 39 y un 58% en la Antártida, un 70% en Japón, un 75% en las profundidades del Mediterráneo, y un 80% en Australia).
Más de 300 líderes se reúnen esta semana en el Royal Institution of Great Britain, el Royal Society y el Museo de Historia Natural de Londres (Reino Unido) para compartir una década de resultados y considerar sus implicaciones. Durante estos encuentros también se explorará la idea de continuar con el Censo de la Vida Marina.