A raíz del derrame de crudo ocurrido tras el choque entre los buques Syros y Sea Bird, en Uruguay, el pasado 3 de junio de 2008, Fundacion La Tortuga extendió su apoyo a la Fundación Socobioma, institución uruguaya radicada en el departamento de Maldonado, dedicada al rescate y la rehabilitación de animales silvestres que se encuentran en peligro.
Las acciones de apoyo consisten en recuperar y reinsertar en su habitat natural a más de 140 pingüinos del magallanes que se vieron afectados por el desastre. Según la Dirección Nacional de Medio Ambiente de Uruguay, 14 millones de litros de petróleo fueron derramados, causando graves impactos a las costas de La Floresta, Piriápolis y Punta del Este de la región austral.
Carla Galindez, delegada de Fundación La Tortuga en Uruguay, informó que en unos 20 días las especies recuperadas serán liberadas en las aguas de Punta del Este para que continuen con su ruta. Para estabilizar a los pingüinos, en casos como estos, primero se rehidratan con sales, se les facilita la evacuación de petróleo que pudieran haber ingerido y se limpia el combustible que ha penetrado vías respiratorias y ojos.
Luego de alimentados y que se puedan parar sobre sus patas, los pingüinos se calientan para ser bañados con jabón biodegradable a una temperatura de 40 grados centígrados. Estas especies al quedar cubiertas de petróleo, pierden la impermeabilidad de su plumaje que los aisla del frío y al sertir bajas temperaturas no se sumergen a buscar alimento y se debilitan.
Para bañar un ave marina de este tipo se requiere, al menos, del apoyo de tres personas. Para secarlos se utiliza una lámpara de 150 vatios. Para ejercitarlos y aliviar el stress se colocan en una piscina que fortalece sus músculos con el nado y al final, al confirmar que están sanos y fuertes, se liberan en grupos.
Hasta la fecha varios organismos gubernamentales e instituciones ambientales han participado en las labores de limpieza de las aguas y costas, en espera de que el crudo pueda ser removido casi en su totalidad para el comienzo de la próxima temporada vacacional.
Esta es la primera acción de Fundación La Tortuga en Uruguay que, gracias a su delegada Carla Galindez, ha podido ser emprendida con éxito en alianza con la Fundación Socobioma, institución hermana con quien compartimos el principio de protección y conservación del ambiente y sus especies como medio para construir el mundo que todos queremos.