De este modo, el Gobierno regional facilita el conocimiento por parte de los madrileños de las especies más emblemáticas que habitan este espacio natural de máxima protección y favorece la creación de una conciencia de conservación, razón que justifica el reconocimiento de Guadarrama como Parque Nacional.
La exposición se prolongará durante todo 2015 y cuenta con una colección de piezas naturalizadas aisladas o en maquetas que escenifican distintos ecosistemas elaboradas por los hermanos Luis y José María Benedito. Ente las piezas hay águilas imperiales y reales, buitre negro y leonado, cigüeña negra, cabra montés, corzo, desmán y mariposas como la emblemática Graellsia Isabellae. Destaca la presencia del toro de Veragua, emblemático de la Sierra de Guadarrama y que a principios del siglo XX se convirtió en el estándar de la raza de los toros de lidia.
La exposición está dirigida a un público generalista, con textos breves acompañando a cada pieza. No obstante, quienes deseen información más en profundidad podrán obtenerla a través de los códigos BQ instalados en los distintos recursos educativos, que ofrece información en español e inglés. Desde el Centro de Investigación, Seguimiento y Evaluación del Parque Nacional se llevan a cabo multitud de proyectos de investigación, buena parte de ellos en colaboración con otras instituciones científicas nacionales e internacionales.
A día de hoy se desarrollan en este espacio más de 50 investigaciones sobre especies, poblaciones y procesos ecológicos. De ellas, casi una cuarta parte se realizan en colaboración con el CSIC, institución de la que depende el Museo Nacional de Ciencias Naturales. En los últimos tiempos, se han conseguido decisivos avances sobre la fauna del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Así, se han consolidado e incrementado las poblaciones de especies protegidas como el buitre negro, el águila imperial ibérica o la nutria.
Además, la irrupción de otras especies protegidas, habituales bioindicadores que atestiguan el buen estado de salud del medio natural, han hecho su aparición. Es el caso del lobo, del que se constató su reproducción en el entorno del Parque, o de la rana patilarga, que se reprodujo con éxito en la Hoya de Peñalara tras más de 20 años sin hacerlo gracias a los trabajos desarrollados en el Centro de Cría en Cautividad de Anfibios Amenazados, pionero en España y puesto en marcha conjuntamente con el Museo Nacional de Ciencias Naturales.
En el ámbito del Parque Nacional se reproducen al menos 246 especies de vertebrados y entre 15.000 y 20.000 invertebrados. Representa más del 55% de los vertebrados de toda la España peninsular, siendo especialmente notable la representación del grupo de aves con 133 especies reproductoras distintas, seguido de los mamíferos, con 58 especies, 23 especies de reptiles, 17 de peces y 15 de anfibios. De ellos, 25 especies son endemismos ibéricos y 13 de ellas catalogadas a nivel nacional como "en peligro de extinción
