En el momento de la inspección se han encontrado 10 caballos, 6 yeguas y 2 potros (uno de ellos de apenas tres semanas de edad), además de 11 cerdos vietnamitas, 39 cabezas de ganado caprino, 15 de ovino y 32 aves.
El único alimento del que disponían los animales eran patatas fritas y destrío de pienso, llegando algunos de ellos a presentar un evidente estado de delgadez, como en el caso de los équidos.
Las instalaciones carecían, además, de la iluminación artificial necesaria para que el ganado pudiera desenvolverse en horario nocturno.
Documentalmente, la explotación carecía del preceptivo código de Registro de Explotación Ganadera, de la correspondiente licencia municipal de actividad y del libro de tratamiento médico del ganado. La intervención se llevó a cabo después de que un ciudadano comunicara en un Puesto de la Guardia Civil el lamentable estado en el que se hallaban los animales.
Las actuaciones practicadas han sido remitidas a la Dirección General de Ganadería y Pesca de la Consejería de Agricultura y Agua de la Región de Murcia.