Los sucesivos proyectos de recuperación y conservación de la especie, sustentados en gran medida en los programas de cría en cautividad, han propiciado que la especie haya pasado de la catalogación de “en peligro crítico de extinción” en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza a la de “en peligro” y que aspire ya a ser calificada como “vulnerable”.
Los primeros esfuerzos (entre 2002 y 2006) se centraron en recuperar las poblaciones en Andalucía; después (entre 2006 y 2011) los trabajos se volcaron en la creación de nuevos núcleos, también en Andalucía. El proyecto europeo Life Iberlince (que arrancó en 2011 y finaliza este año) se propuso y ya ha logrado recuperar la distribución histórica de la especie, con poblaciones en Castilla-La Mancha, Extremadura y Portugal, además de Andalucía.
Una situación “dramática” al principio de siglo
El director de Iberlince, Miguel Ángel Simón, ha recordado que la situación de la especie al comienzo del siglo era “dramática” y ha valorado cómo han contribuido los diferentes programas de conservación a su recuperación.
En declaraciones a EFEverde durante una visita para conocer algunos de los lugares donde se está reintroduciendo el lince, Simón ha subrayado que los próximos retos son dos: consolidar las áreas donde se ha reintroducido el lince fuera de Andalucía y conseguir “conectar” las diferentes poblaciones para propiciar un intercambio genético que fortalezca la especie.
A largo plazo, Simón confía en conseguir reducir las liberaciones procedentes de la cría en cautividad “porque la especie llegue a tener capacidad de supervivencia por sí misma” y se sitúe “en una senda de normalidad”, pero ha incidido en que será determinante comprobar cómo evoluciona la enfermedad hemorrágica del conejo, del que depende en un 80 por ciento la dieta del felino.
Hoy, unos 450 linces campean por Andalucía y otros 145 por las distintas áreas de reintroducción: Sierra Morena Oriental en Ciudad Real, los Montes de Toledo, el Valle de Matachel-Ortiga en Badajoz y el Valle del Guadiana en Portugal.