Analizan su crecimiento y su alimentación en masas de agua con diferentes características físicas, unas de origen mediterráneo y otras de procedencia atlántica.
El estudio analiza las rutas tróficas de las larvas de melva (Auxis rochei), es decir, la procedencia de su alimento a lo largo de toda la cadena alimentaria, y las compara en diferentes condiciones ambientales para encontrar diferencias en el crecimiento y desarrollo de las larvas en función de si habitan una u otra masa de agua.
Los investigadores llevaron a cabo un estudio combinado del crecimiento diario de la larva a partir del análisis de la microestructura del otolito junto con el análisis de la huella isotópica del carbono y el nitrógeno (indicadores del origen de su alimentación), tanto de las larvas objeto de estudio como de diferentes fracciones del zooplancton que forman parte de su dieta.
En el estudio se diferenciaron dos tipos de masas de agua en función de sus propiedades hidro-biológicas: una masa de agua con características más atlánticas y otra más mediterránea. Las larvas que se encontraron en las aguas mediterráneas fueron mayores en talla y peso, como consecuencia de un mayor crecimiento diario y una mejor condición.
Además, estas larvas presentaban valores mas elevados de la huella isotópica del nitrógeno, sugiriendo una mayor especialización trófica, atribuible a las diferencias en la cadena alimenticia zooplanctónica de las distintas masas de agua. Por otro lado, las diferencias encontradas en la huella isotópica del carbono de las larvas, sugieren un distinto origen de la fuente de alimento para las dos masas de agua. El trabajo revela el potencial del análisis de isótopos estables para diferenciar rutas tróficas en las fases tempranas del desarrollo.
El estudio se ha desarrollado en el marco del proyecto ICTIOMED financiado por el Instituto Español de Oceanografía.