Tortuga boba
El equipo de Clínica y Rescate de CRAM recibió aviso de tortuga viva en la playa de Castelldefels el pasado 22 de junio de madrugada. La policía local del municipio la trasladó a dependencias municipales debido a que en la playa se realizaban trabajos de limpieza con maquinaria pesada y en previsión de una multitudinaria verbena en la misma arena la noche siguiente.
El veterinario de CRAM se desplazó hasta el lugar de inmediato, a instancias de la Xarxa de Rescat de Fauna Marina de la Generalitat de Catalunya, para evaluar el estado del animal y trasladarlo hasta el centro de recuperación.
El ejemplar adulto de Caretta caretta, de 50 kg de peso, presentaba heridas en el ojo izquierdo y diversas laceraciones. Ya instalada en un tanque y pocas horas después del ingreso, la tortuga hizo una puesta de un centenar de huevos. A pesar de las pocas probabilidades de viabilidad de dichos huevos, el equipo CRAM procedió cuidadosamente a depositarlos en recipientes con arena para preparar un posible traslado a una incubadora.
A la mañana siguiente, la doctora y experta en la materia, Elena Abella, expertos de Fundación Oceanogràfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia y técnicos de la Xarxa de Rescat de Fauna Marina de la Generalitat de Catalunya, se desplazaron hasta el centro de recuperación de la Fundación CRAM para evaluar con los veterinarios de CRAM, el procedimiento más adecuado para la gestión de estos huevos. A pesar de las escasas expectativas de éxito, teniendo en cuenta el gran valor que supone una puesta de una especie en peligro de extinción como esta, se decidió trasladarlos a las incubadoras para poder valorar en el transcurso de unos días la viabilidad de los mismos.
Paralelamente, veterinarios de CRAM junto con veterinarios de la Fundación Oceanogràfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, realizaron ecografías de alta calidad a la hembra para detectar la presencia de huevos en formación. Los resultados fueron esperanzadores. Se constata la presencia de folículos, que en unos días se transformaran en huevos preparados para ovoposición.
Tras recibir el alta clínica y gracias a la colaboración de la Asociación Chelonia y de especialistas en seguimiento vía satélite de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), la hembra pudo ser reintroducida en el medio natural con un dispositivo de seguimiento vía satélite el pasado 24 de junio por la tarde en una de las playas del Prat de Llobregat. El emisor permitirá hacer el seguimiento del animal y poder prever en qué playas podría hacer una futura puesta de huevos.
